La Asamblea Nacional de Venezuela rechazó este martes el decreto del presidente Nicolás Maduro que declaró el Estado de Excepción y de emergencia económica, así como ratificar el referéndum revocatorio.
De acuerdo con la legislación venezolana, la Asamblea –compuesta en su mayoría por la oposición– debió aprobar la extensión del Estado de Excepción a través de una votación, sin embargo el decreto presidencial supuestamente imposibilitaba este recurso.
El presidente de la Asamblea, Henry Ramos Allup, dijo que el decreto está "desaplicando" la Constitución, porque según él la medida busca remover las facultades constitucionales del Parlamento. También señaló que Maduro "no se resigna" a perder el control del Legislativo y busca anular ese órgano de cualquier manera, utilizando para ello al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) como lo hizo con la Ley Amnistía.
La tensión política entre ambos poderes del país cada vez más va en aumento. “Si Maduro quiere aplicar el decreto, que vaya sacando los tanques de guerra. No vamos a aceptarlo, hago un llamado al país a desconocer ese decreto. Le digo a la FAN (Fuerza Armada Nacional) que está llegando la hora de la verdad (…) No queremos solución militar, pero esto es inaceptable”, dijo el excandidato presidencial Herique Capriles Radonski.
Por su parte, el mandatario advirtió en el Palacio de Miraflores que el Congreso unicameral perdió vigencia política, por lo que su extinción es cuestión de tiempo. Y agregó que no están obligados a hacer un referéndum en el país.
Además, Maduro reiteró que es víctima de una conspiración internacional para derrocar su gobierno. Insistió que existe una “brutal” camapaña política y mediática en su contra. Del mismo modo, Venezolana de Televisión denunció esta semana que la prensa española ha emprendido una campaña en contra del gobierno.
El presidente afirmó que se intenta llevar a “Venezuela a una situación generalizada de violencia que sirva como excusa posterior a una intervención militar internacional”, informó El Financiero. Por tal razón anunció una “contraofensiva” política para dar fin a las “amenazas” y “agresiones” que provienen –según él– del eje formado por Miami-Madrid-Bogotá.
Esta semana también llegaron los expresidnetes de España, Panamá y República Dominicama auspiciados por la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) para "abrir un espacio de diálogo entre la oposición y el gobierno", aunque hasta el momento no se han enunciado cómo lo harán.
iesz
