México es uno de los “países de preocupación” para la Oficina de Derechos Humanos de la ONU, y en ese sentido, la alta comisionada de la ONU-DH, Michelle Bachelet, llamó al presidente Andrés Manuel López Obrador a abstenerse de “usar un lenguaje que socave” a las instituciones electorales y a las “opiniones disidentes”.
“Aliento a las autoridades a que se abstengan de utilizar un lenguaje que socave a quienes expresan opiniones disidentes o que de alguna manera pongan en duda la independencia de los órganos autónomos, incluidas las instituciones electorales”, dijo la comisionada.
Asimismo, Bachelet manifestó su elevado grado de alarma por el “alto nivel de violencia política en el contexto electoral” mexicano.
Durante la sesión inaugural de la 47 sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, realizada este lunes 21 de junio, Bachelet mencionó una serie de situaciones internacionales que provocan preocupación a su oficina y entre dichas situaciones señaló la violencia política y electoral que vive México, así como los ataques verbales que el gobierno de López Obrador efectúa contra organismos autónomos y personas que no coinciden con su gobierno.
Al recordar que durante el pasado proceso electoral, que culminó el 6 de junio, se verificaron al menos 91 asesinatos por motivos políticos, Bachelet instó al gobierno mexicano a investigar estos crímenes “con el fin de asegurar la rendición de cuentas por estos actos y asegurar su no repetición”.
Además de los asesinatos, dijo, hubo “otros ataques y amenazas que pusieron en peligro la vida de políticos, sus partidarios y funcionarios públicos comprometidos en el trabajo electoral”.
A ello se sumó la violencia en contra de las mujeres participantes en política, muchas de las cuales se enfrentaron a la violencia de género en forma de violencia sexual y campañas de difamación.
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