La Agencia de Innovación Pública Gubernamental de la Ciudad de México, a cargo de José Antonio Peña Merino, gastó 925 mil 750 pesos en mandar mensajes de WhatsApp a tan sólo 2 mil 571 personas, como parte de un programa que ha sido un completo fracaso.
De acuerdo con una investigación realizada por etcétera, la ADIP, a cargo del funcionario José Merino gastó casi un millón de pesos en pago de servicios de mensajería vía WhatsApp como parte de un programa llamado SENTIKA, que apenas logró integrar a 2 mil 571 personas.
La dependencia capitalina otorgó dos contratos por adjudicación directa a la empresa OPIT, S.A. de C.V., empresa propiedad de los hermanos Gilberto y Gerardo Iglesias Rodríguez. Esta empresa, según dice su perfil digital, se dedica a crear “procesos de automatización con bots” y fue contratada para que enviara mensajes automatizados a los registrados en SENTIKA.
Sentika es una app creada por la Agencia de Innovación Digital para poner en contacto a voluntarios capitalinos en caso de sismo, con la finalidad de organizar brigadas de ayuda, canalizar peticiones y otras actividades. Supuestamente, en caso de un desastre, el gobierno enviaría a los registrados, vía WhatsApp, mensajes automatizados para coordinarse con ellos. Pero la idea no prendió y a pesar de que la capital tiene una gran tradición de solidaridad civil, no se registraron ni tres mil personas, cuando bien pudieron ser cientos de miles.
Sin importar que fueran muy pocos usuarios, el servicio de mensajería automatizada se pagó igual. Los contratos referidos fueron por 625 mil 750 pesos el primero y el segundo por 300 mil pesos.
Ambos contratos son por el concepto “Contrato Abierto para la Prestación del Servicio de Mensajería Instantánea WhatsApp”.
El servicio se divide en 3 conceptos: “Servicio de Mensajería Instantánea WhatsApp ” por el cual, en el contrato ADIP/SER/046, se estableció un precio base de 190 mil pesos; “Servicio de usuarios de mensajería instantánea de WhatsApp” por el cual se estableció un precio base de 246 mil 400 pesos y una cantidad mínima de 60 mil mensajes y máxima de 110 mil mensajes; “Servicio de mensaje de inicio de mensajería Whatsapp” por el cual se estableció un precio base de 103 mil pesos, con un mínimo de 4 mil mensajes y un máximo de 8 mil mensajes.
Además se establece que la empresa OPIT entregará un documento denominado “Acuerdo de Nivel de Servicio” (SLA) en el que el proveedor garantizará:
El cumplimiento de al menos un 99.5% de disponibilidad del servicio, número telefónico de ayuda, mesa de servicio, registro y seguimiento de reportes en un esquema de soporte 24x7x365. También: la asignación de un contacto de cuenta, quien dará seguimiento a las solicitudes referentes al servicio, atención a fallas en menos de 30 minutos y solución de fallas en menos de 4 horas.
La minúscula base del programa
Según la página web de la ADIP, el programa Sentika nació como una plataforma que permite a las personas apoyarse y colaborar JUNTAS de manera espontánea, solidaria y voluntaria para ayudar a víctimas de desastres y salir a las calles de la Ciudad para identificar daños e informar necesidades”.
Los usuarios se registran en un sitio web, y de ahí la empresa OPIT se encarga de mandar las actualizaciones vía WhatsApp.
El problema para la agencia es que de acuerdo a una solicitud de transparencia a la cual tuvo acceso la revista etcétera, hasta 2022 sólo tenían la ínfima cantidad de 2,571 personas registradas en el programa estrella de Pepe Merino. De hecho, la cifra original era de 2 mil 873 personas, pero tras eliminar registros duplicados, se quedó en 2 mil 571.
A pesar de esta bajísima data, esto no evitó que la agencia renovara el programa, al asignar el mencionado segundo contrato por 300 mil pesos.
En el portal de la ADIP están disponibles los datos de Sentika. Los usuarios están registrados por zonas de la CDMX y en la página puede verse que la gran mayoría de las regiones no tienen un solo usuario registrado. De las que sí tienen usuarios, la mayoría tienen participación incompleta y no son ni siquiera treinta zonas las que tienen el número de voluntarios suficientes.
Entre las que sí están completas se encuentran El Ajusco, Roma Norte,Tlalpan y Lindavista.
