Un joven estudiante de 17 años y un hombre de 33 murieron la noche del pasado lunes producto del impacto de proyectiles durante manifestaciones que se desarrollaron en el estado fronterizo de Táchira, Venezuela.
Luis Alviárez Jaimes, de 17 años, protestaba en Palmira, municipio Guásimos, cuando recibió el impacto de un proyectil en el cuello. Al confirmase el deceso, un grupo de personas incendió la sede de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) a quienes responsabilizaron de esa muerte.
Por otra parte, Diego Armando Hernández Barón, de 33 años, pasó con su motocicleta por el lugar donde se registraba una confrontación entre manifestantes y fuerzas policiales cuando fue alcanzado por un proyectil que le impactó en su pecho, según dijo el alcalde de Capacho Nuevo, Jorge Galiano.
El Defensor del Pueblo, Tarek William Saab, confirmó las muertes y pidió a la delegación regional de la entidad realizar una “exhaustiva investigación que esclarezca la verdad de esos terribles hechos”.
Con estas dos muertes se eleva a 44 la cifra de víctimas mortales, de acuerdo con los datos de la Fiscalía General de ese país.
Asimismo se registraron en ese estado que colinda con Cúcuta, Colombia, más de 26 heridos, al menos dos de gravedad por heridas con armas de fuego. No se registraron detenidos.
En otros estados bolivarianos, el Gran plantón de ayer dejó varios diputados y elementos de la policía heridos, siendo Caracas, Carabobo y Tachira los lugares donde más actos violentos se registraron ayer.
(Con información de El Universal de Venezuela)
cdr