El exgobernador de Tamaulipas (2005-2010), Eugenio Hernández Flores, sostuvo que ya acreditó ante las autoridades mexicanas su patrimonio en Estados Unidos, y lo mismo hará con las estadounidenses.
Este viernes se dio a conocer que el fiscal Kenneth Magidson hizo pública la acusación en contra del exfuncionario por lavado de dinero (alrededor de 30 millones de dólares). Además, informó que ya se le habían decomisado tres propiedades ubicadas en McAllen, Texas, valoradas en más de dos millones de dólares, y una en Austin.
Al respecto, Hernández dijo a Reforma que dicha acusación es un mal entendido resultado de un caso en el que se vio implicado su cuñado, Óscar Gómez Guerra. Afirmó que tiene las pruebas para demostrar su inocencia, pues únicamente tiene una cuenta de cuatro millones de dólares en EU (producto de su trabajo como contratista) y aseguró que no sabe de donde salieron los 30 millones que le imputan.
“La acusación es una réplica de la acusación que le hicieron a mi cuñado Óscar Gómez Guerra el año pasado, en donde no le dieron ni la oportunidad de dar información, lo sorprendieron, él tiene operaciones comerciales que ha realizado en el país, y todas sus declaraciones del SAT, tiene sus ingresos justificados, y ya él mismo aclaró que yo no tenía absolutamente nada que ver con sus operaciones“, declaró.
Asimismo, Hernández afirmó que es dueño de dos propiedades en McAllen, mismas que no están embargadas. Aprovechó para recordar que durante el sexenio de Felipe Calderón fue investigado por la PGR por ilícitos similares pero la dependencia no encontró elementos para ejercer penalmente en su contra.
La acusación se realizó el 12 de marzo del 2014, en secreto, en contra de Hernández y su cuñado, ante la jueza Nelva González de la Corte para el Distrito Sur de Texas en Corpus Christi. El pasado 27 de mayo, la fiscalía sumó algunos detalles a los cargos hasta que esta semana se hicieron públicos.
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