El excandidato presidencial panista Ricardo Anaya aseguró que el exdirector de Pemex, Emilio Lozoya, utilizó el nombre y los datos de una mujer que ya murió para poder quedarse con los 6 millones de dólares que recibió como soborno por parte de Odebrecht y que el presiente Andrés Manuel López Obrador lo sabe y lo autoriza.
Lozoya declaró hace meses que el dinero de los sobornos lo repartió y no se quedó con nada.
“Sólo López Obrador cree ese cuento. Y no por ingenuo: por perverso y por corrupto. Lo que pasa es que no importa que la historia sea absurda y que todas las pruebas demuestren lo contrario. Mientras Lozoya diga que le dio el dinero a los del PAN, López Obrador está feliz”, dijo Anaya.
En el tercer video de la serie de 4 que comenzó a difundir esta semana, Anaya abundó en lo que anunció en la segunda parte: que AMLO permitió a Lozoya quedarse con los 6 millones de dólares, a cambio de que declarara contra él.
Tras analizar las pruebas y documentos que la propia Fiscalía General de la República le entregó, como parte de su derecho a conocer el expediente en su contra, Anaya dijo que lo ocurrido está muy claro: Lozoya miente respecto al uso del dinero y el presidente finge creerle, con tal de llevarlo a él a la cárcel.
Lozoya dijo que todo el dinero de los sobornos lo repartió, pero “en los mismos documentos que ellos me entregaron está la prueba de que esto es falso. Ahí está la prueba de que Lozoya se quedó con la lana y que López Obrador lo está dejando quedarse con todo ese dinero”, afirmó.
“En la página 562 del anexo 4 está el estado de cuenta de la empresa Zecapan. Acuérdense que el brasileño, el director de Odebrecht, ya confesó que ahí, en la cuenta de la empresa Zecapan, fue donde se depositó el dinero del soborno para Lozoya”.
Anaya argumentó en el tercer video que en el expediente que le dio la FGR hay pruebas que demuestran que Lozoya conservó el dinero del soborno, utilizando para ello las cuentas de la empresa Zecapan, propiedad de un socio comercial de Lozoya.
Refiere que dicho socio declaró ante la FGR que esos 6 millones de dólares le fueron depositados por “una señora del estado de Hidalgo” que falleció muy poco tiempo después de entregar ese dinero, en octubre de 2014. El acta de defunción y la credencial de elector de la señora, de apellido Tapia, están en el expediente y Anaya mostró a la cámara dichos documentos.
“Una manera muy lógica de investigar sería citando a declarar a esa señora del estado de Hidalgo y decirle: ‘a ver, señora, ¿cómo está eso de que usted le dio 6 millones de dólares al socio de Lozoya? ¿Usted de dónde sacó tanto dinero?”.
Pero, agregó, “da la casualidad de que ya no es posible citar a la señora de Hidalgo” porque “se murió el 4 de octubre de 2014”.
“¡Qué conveniente! Toda la historia de Lozoya y de López Obrador se basa en una persona que está muerta desde hace siete años”.
En su declaración, el socio de Lozoya dice que la señora Fabiola Tapia le pagó 6 millones de dólares por la venta de una tecnología de asfaltado “muy novedosa” que aún no estaba completamente desarrollada.
Anaya investigó más sobre Fabiola Tapia y encontró dos cosas:
1.- Su única herencia fue una casa de 160 metros cuadrados.
2.- El domicilio que aparece en su credencial del INE corresponde a una casa “modesta, de un poblado pequeño”.
Por esos puntos anteriores, dijo el panista, es absurdo creer que tal persona haya contado con 6 millones de dólares para comprar tecnología al socio de Lozoya, pero aún así, AMLO hizo como que le creía.
“Es una mentira monumental. Pero eso a la Fiscalía no le importa. A la Fiscalía de López Obrador le conviene creerle a Lozoya y a su antiguo socio, y los está dejando quedarse con los 6 millones de dólares”, dijo.
“Es mentira que para septiembre (de 2014) Lozoya ya hubiera repartido los 6 millones de dólares del soborno, miren, dos meses después, en noviembre, el dinero seguía ahí, este es el estado de cuenta de la empresa en la que Lozoya pidió que se lo depositaran. Es muchísimo dinero, Lozoya no lo repartió: se lo quedó”.
Se recordará que la FGR investiga a Anaya por cohecho, por presuntamente haber recibido un soborno en 2014 para que, siendo diputado, votara a favor de la Reforma Energética. Lozoya ha admitido que recibió sobornos de Odebrecht y el director de esa empresa confesó lo mismo ante autoridades de Estados Unidos.
Cuando fue extraditado a México, solicitó un trato con la FGR, y así, en un largo testimonio, acusó a numerosos personaje políticos. Sobre Anaya dijo que le fue entregado un soborno en 2014 para que votara a favor de la Reforma Energética, pues supuestamente Odebrecht eso deseaba. A partir de esa acusación, la FGR busca detener al panista.
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