Por votación unánime, el Senado argentino autorizó el registro de las propiedades de la expresidenta y actual senadora Cristina Fernández de Kirchner, a fin de recabar elementos de pruebas que permitan acreditar su presunta participación en una red de sobornos durante su administración y la de su esposo Néstor Kirchner.
A solicitud del juez Claudio Bonadio, los 67 congresistas presentes en la sesión, incluida la propia exmandataria votaron en favor de permitir la revisión de los inmuebles, acción que enfrentaba el impedimento legal del fuero del que gozan los senadores. De esta forma, las autoridades judiciales podrán catear su departamento en Buenos Aires y sus casas en Río Gallegos y El Calafate.
Fernández de Kirchner pidió a sus correligionarios en la Cámara alta apoyar el proyecto para poner fin al espectáculo en que, a su juicio, se ha convertido el proceso legal en su contra. Asimismo acusó un uso faccioso de las instituciones de justicia por parte del presidente Mauricio Macri, quien al igual que otros gobiernos de derecha en América Latina persigue a los líderes populares.
“¿Saben quién puede ganar las elecciones de Brasil en primera y segunda vuelta? Lula da Silva. Pero no puede serlo porque lo metieron preso. ¿Les suena? Me suena y mucho”, señaló Fernández de Kirchner, quien por el momento no ha definido públicamente si buscará nuevamente la presidencia de Argentina en los comicios de 2019.
El escándalo sobre los presuntos sobornos estalló el pasado 1 de agosto, luego de que el juez Bonadio ordenara el arresto y comparecencias de varios empresarios y exfuncionarios, cuyos nombres aparecían en unos diarios que durante diez años escribió el chofer del Ministerio de Planificación, en donde narraba cómo trasladaba en su auto bolsas con dólares para presuntamente entregarlos a representantes de los gobiernos de los Kirchner. La exmandataria calificó como un disparate dichas acusaciones.
(Con información de EFE)
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