Tras algunos días de considerar la medida, la Academia Sueca, que otorga cada año el Nobel de Literatura, anunció que el premio no se otorgará este 2018 debido a los escándalos que han afectado a la institución y que han derivado en la renuncia de ocho de sus 18 miembros.
En comunicado de prensa emitido este viernes, la Academia hizo oficial lo que ya se venía especulando ante la falta del mínimo de miembros (12) para elegir al ganador del Nobel de Literatura.
“Es necesario que la Academia tenga tiempo para recuperar su fuerza plena, involucrar a una cantidad mayor de miembros activos y restaurar la confianza en ella antes de elegir un nuevo galardonado”, señala el comunicado, firmado por el secretario interino, Anders Olsson.
Olsson señaló que la crisis que vive la institución, producto de las acusaciones de abuso sexual en contra del esposo de una miembro de la Academia, indica la necesidad de trabajar por un cambio “contundente” y a largo plazo.
El premio que corresponde a 2018 se entregará el año entrante. Es decir, se entregarán juntos el del 2018 y el de 2019.
El escándalo detonó el año pasado, cuando 18 mujeres anónimas dieron a conocer los abusos sexuales que sufrieron por parte del artista Jean-Claude Arnault, esposo de Katarina Frostenson, una de las miembros de la Academia Sueca.
Estos señalamientos impactaron a la Academia, no por el vínculo matrimonial entre Arnault y Frostenson, sino porque estos ocurrieron en instalaciones asociadas con la institución y porque el artista recibía financiamiento de parte de la misma para diversas actividades artísticas.
Luego de que el diario sueco Dagens Nyheter publicó la denuncia anónima de 18 mujeres que fueron víctimas de Arnault, la Academia realizó una auditoría para analizar los vínculos entre el artista y la institución. A partir de entonces, intensos desacuerdos entre los miembros provocaron las renuncias.
La crisis hizo que el propio rey Gustavo tomara cartas en el asunto y anunciara una reforma estatutaria de la Academia para permitir la salida de los miembros, ya que la actual normativa señala que la pertenencia a la misma es vitalicia. Esto no significa que se le obligue a un miembro a permanecer, sino que aunque renuncie, legalmente sigue siendo parte de la institución y no puede ser reemplazado.
Una vez que la reforma a los estatutos se concrete, se podrán cubrir los asientos vacantes y seguir con el trabajo de selección del Nobel de Literatura, trabajo que se estaba realizando con toda la normalidad posible, según se había informado en semanas pasadas.
ofv