Debido a la manipulación de muestras antidopaje de sus atletas y por una decisión unánime del Comité Ejecutivo de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) durante su reunión en Lausana, Rusia ha sido suspendida para organizar o participar en eventos deportivos internacionales durante los próximos cuatro años.
De esa forma, Rusia no tendrá participación en importantes justas deportivas internacionales, como los próximos Juegos Olímpicos, tanto de verano, a realizarse el año próximo en Tokio, como de invierno, que se efectuarán en Pekín en 2022, así como en el Campeonato Mundial de Futbol de Catar, que se llevará a cabo en este último año.
La determinación de la AMA también prohíbe a directivos rusos formar parte de organismos deportivos internacionales, además de que las ciudades rusas no podrán presentar candidaturas a los Juegos Olímpicos de Verano de 2032.
Pese a ello, los deportistas rusos que logren demostrar que no han incurrido en dopaje, podrán competir bajo una bandera neutral.
Según se informó, el organismo internacional antidopaje consideró que las manipulaciones de las pruebas (que consisten, fundamentalmente, en la implantación de evidencias falsas y la eliminación de archivos) por parte de la Agencia Antidopaje Rusa (Rusada) hicieron que fuera imposible determinar si 145 de los 198 atletas rusos violaron las reglas antidopaje entre 2012 y 2015, por lo que la AMA consideró que Rusia ha intentado encubrir posibles positivos.
Esta investigación, emprendida este año, fue realizada después de que en 2018 se permitió participar a Rusia en diversas competiciones pese a la suspensión de tres años en pruebas atléticas que se le había impuesto por los casos de dopaje descubiertos en 2015.
Así, en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, Brasil, en 2016, los atletas rusos compitieron pero bajo bajo la bandera olímpica, mientras que en los Juegos Olímpicos de Invierno de Pieonchang, Corea del Sur, que se celebraron en febrero de 2018, participaron 168 atletas rusos bajo una bandera neutral, quienes obtuvieron 33 medallas, 13 de ellas de oro.
La AMA difundió un comunicado en el que su presidente, Craig Reedie, manifestó que “el dopaje ruso ha ultrajado el deporte durante demasiado tiempo, y la flagrante violación de las autoridades rusas exige una respuesta enérgica. Se le han dado a Rusia todas las oportunidades para poner las cosas en orden y volver a unirse a la comunidad global contra el dopaje, por el bien de sus atletas y la integridad del deporte, pero ha escogido seguir su postura de engaño y negación, por lo que AMA ha respondido en los términos más fuertes que puede”.
A partir de hoy Rusia tiene 21 días para presentar una apelación ante el Tribunal de Arbitraje del Deporte.
A finales de noviembre, el jefe de la Rusada, Yuri Ganus, había dicho que creía que la sanción de la AMA sería por cuatro años, y que “nos hundimos en una nueva crisis antidopaje”.
Y manifestó que “lo más duro y lo más trágico es que nuestros deportistas son rehenes de los responsables deportivos” de su país.