Pablo Llarena, juez del Tribunal Supremo de España ordenó, el día de hoy, retirar las órdenes europeas de detención contra el expresidente catalán Carles Puigdemont y los cuatro exconsellers de la Generalitat que se encuentran en Bélgica; sin embargo, mantienen la orden de arrestarlos si regresan al país.
Los cinco políticos se instalaron en la capital belga hace varias semanas mientras la justicia española actúa contra todos los integrantes del Ejecutivo autonómico catalán, cesados por el gobierno español el 27 de octubre por impulsar un proceso independentista.
Este nuevo giro con la crisis de Cataluña coincide con el lanzamiento de la campaña electoral en esa región.
Por su parte, Jaume Alonso-Cuevillas, abogado en España de Carles Puigdemont, abrió la posibilidad de que el mandatario vaya a votar en las elecciones catalanas del 21 de diciembre: Sería detenido “inmediatamente” pero pese a saber las consecuencias, “tiene un compromiso político firme”, manifestó.
La justicia belga será notificada sobre esta decisión y por lo tanto el pronunciamiento previsto para el día 14 de este mes sobre su extradición quedará suspendido, por lo que todos podrían volver a España aunque seguiría imputado.
El magistrado explicó que quiere evitar el riesgo de que la justicia belga limité los delitos imputables a Puigdemont y sus acompañantes, pues generaría “una distorsión” respecto al resto de los líderes independentistas que se quedaron en España, cuatro de ellos en prisión preventiva.
El hecho de que los casos dependieran de la justicia de Bélgica hacía que fueran juzgados por malversación y por desobediencia, pero no por rebelión, por lo que no habría igualdad de condiciones con quienes están en España.
(Con información de Agencias)
ess