Según el vocero del Comando Norte del Ejército de Estados Unidos, Michael Kucharek, este fin de semana serán desplegado 7 mil soldados en tres estados fronterizos con México. Esto forma parte de la operación Patriota Fiel, que busca impedir el ingreso la caravana de migrantes hondureños a ese país.
Los militares se encontrarán en cuatro bases: la aérea Davis-Monthan, en Arizona; la naval de San Diego y la de los marines en Pendleton, ambas en California, y la naval de Corpus Christi, Texas.
Mil de los soldados ya se encuentran en McAllen, Texas, uno de los principales cruces fronterizos con México.
Antes de esta movilización ya estaban en la zona 2 mil 100 de la Guardia Nacional, a los que ahora se sumarán 5 mil 239 elementos.
La fuerzas armadas de Estados Unidos esperan tres grupos de migrantes con unos seis mil integrantes cada uno.
Apenas el miércoles pasado, Donald Trump dijo que su gobierno podría enviar hasta 15 mil soldados a los límites con México. Por el momento, el Pentágono ya tiene unos 2 mil que esperan ser desplegados en la zona fronteriza.
El presidente Trump comentó ayer que los soldados estadounidenses pueden responder con disparos a los migrantes en caso de que les lanzaran piedras.
Sin embargo, hoy el mandatario reculó y dijo que los inmigrantes que lancen piedras contra los militares serán arrestados, pero que los soldados no dispararán.
Sobre éstos, dijo: “No tendrán que disparar. Lo que no quiero es que esta gente tire piedras”, comentó Trump en la Casa Blanca. “Si nos hacen eso, van a ser arrestados durante un largo tiempo”.
Por otra parte, Joel Millman, vocero de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), comentó que la militarización generalmente es poco útil para disuadir la llegada de migrantes.
“No tenemos como política comentar las decisiones de un Estado miembro, no importa cuál sea, pero lo que hemos dicho repetidamente y en todo el mundo es que las barreras y las fronteras mlitarizadas no suelen disuadir a los que intentan cruzarlas”.
Lo que la militarización sí provoca es aumentar tanto las ganancias de los traficantes de personas como el número de muertos.
Por su parte, el portavoz de la Agencia de la Organización de las Naciones Unidas para los Refugiados, dijo que “cualquier persona que huya de un conflicto, de persecución o que se sienta insegura en su propio país debe tener acceso al territorio y un procedimiento de asilo, así como a ser recibido humanamente y a ser tratado con justicia. Pedimos humanidad y alejar esta discusión de la política”.
arm