La Cámara de Representantes del estado de Texas en Estados Unidos, dominada por los republicanos, aprobó en la madrugada de este jueves un proyecto de ley que busca penalizar a los gobiernos locales y a las universidades que decidan no cumplir las leyes migratorias federales para favorecer a los inmigrantes indocumentados, según un reporte de la agencia de noticias EFE.
La cámara también respaldó una enmienda que permitirá cuestionar el estatus migratorio de las personas detenidas en Texas.
Es de resaltar que este es uno de los estados con más inmigrantes en el país.
La medida que afecta a las "ciudades santuario", localidades que no colaboran con las autoridades federales para deportar a inmigrantes, fue aprobada con 95 votos a favor y 54 en contra.
Así, los jefes policiales y otros funcionarios podrían enfrentar cargos de falta al deber y ser despedidos por no ayudar a aplicar la ley inmigratoria. Mientras que la entidad que incumpla la ley podría estar sujeta a una penalidad civil de mil 500 dólares por una primera infracción y de 25 mil por cualquier reincidencia.
Las acciones del gobierno de Texas contra las "ciudades santuario" coinciden con las del presidente Donald Trump desde su llegada a la Casa Blanca. Pues en su primera semana firmó una orden ejecutiva destinada a negar fondos a las "ciudades santuario" y meses después lanzó un ultimátum para las localidades que se nieguen a acatar las nuevas directrices migratorias.
Sin embargo, un juez federal de San Francisco, California, bloqueó esta semana dicha orden ejecutiva porque considera que viola la Constitución, aunque el presidente ya ha adelantado que prevé llevar el caso ante la Corte Suprema.
(Con información de EFE)
cdr