Tras confirmar la existencia de casos de transmisión local del Covid-19, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, declaró formalmente iniciada la Fase 2 del plan para contener la expansión de la pandemia que consiste fundamentalmente en el fortalecimiento de las medidas de distanciamiento social.
Según el funcionario, la tasa de casos de transmisión local es apenas del 1%, la curva de propagación aún es lenta y aún no se alcanza al punto de inflexión que se ha tenido en otros países de mundo; por lo mismo, dijo, en México se está en el momento justo para entrar a esta etapa y planear las acciones que habrán de seguirse en una tercera fase. Aseguró que, como ha sucedido desde el principio de la contingencia, en nuestro país se actuará oportunamente.
“Todavía no hemos llegado al punto de inflexión, todavía no hemos llegado al punto en donde cambiamos de una propagación a una propagación muy, muy acelerada, y esta es la oportunidad de México. La oportunidad de México es haber actuado oportunamente en reconocer que esto podía darse y haber planeado el momento correcto de la implantación de las medidas comunitarias. El momento es este y, por lo tanto, queremos declarar formalmente el inicio de la fase dos”, aseveró.
Detalló que la Fase 2 incluye el cuidado de los adultos mayores, mujeres embarazadas y enfermos crónicos, esto es, evitar que se expongan a situaciones de contagio; suspensión de clases en todos los niveles y de actividades laborales no prioritarias o que impliquen movilidad de personas en las calles; suspensión de eventos masivos en todo tipo de espacios y extremar las medidas de limpieza.
A decir de López-Gatell, todas las decisiones que se han tomado han estado basadas en criterios científicos y aseguró que estamos lejos de adoptar medidas más radicales que puedan afectar las garantías individuales. Apuntó que cuando se aplican medidas drásticas sin un respaldo científico sólo se genera miedo, caos y confusión, además de que no ayudan a un efectivo control de una epidemia. Insistió en que la forma en que se ha actuado, permite tener escenarios claros y anticiparse a lo que debe hacerse.
“Las medidas que no se amparan en ciencia empiezan a generar preocupación, caos y corren el riesgo de afectar, no solamente la posibilidad de controlar efectivamente la epidemia, sino aspectos fundamentales de la sociedad de la economía pública y también incluso de los derechos humanos. La restricción de movilidad puede ser una medida de salud pública, pero no debe utilizarse como una primera herramienta, esta es una herramienta extrema que se reserva a las situaciones hipotéticas de que se perdiera la capacidad de control. Lejos estamos de ello, hemos podido seguir esta epidemia en cada una de sus fases y esto nos ha permitido trazar horizontes claros, horizontes claros que nos han permitido que con una antelación de varias semanas podamos poner en práctica los recursos, las herramientas, el personal y los métodos necesarios para la contención y la mitigación”, expuso.
Admitió que la tercera fase será inevitable y ésta planteará “retos importantes” para el sistema de salud, sin embargo, afirmó que se cuenta con la infraestructura y los recursos materiales y humanos para enfrentarla. En este sentido, hizo un reconocimiento al personal médico y de enfermería de los servicios públicos de salud y señaló que no es momento de entrar en discordias ni distanciamientos.
“La solidaridad, el compromiso, la responsabilidad profesional de todo el personal de salud en este momento es fundamental. No podemos entrar en ninguna clase de discordia o en alguna clase de distanciamiento emocional y distanciamiento de comunicación, todo el Sistema Nacional de Salud tiene que estar presto y atento para responder a este reto. ¿Cuánto tenemos en infraestructura? Tenemos lo que se ve en esta diapositiva, tenemos una capacidad sólida, tenemos una capacidad amplia, organizándonos de una manera solidaria y generosa entre todas las instituciones del sector salud, las dependencias civiles y militares podemos tener una capacidad suficiente”, concluyó.
Al inicio de la rueda de prensa, el presidente de México Andrés Manuel López Obrador aseguró que “fuimos los primeros en el mundo” en atender este problema de salud pública y según él, desde el principio se han tomado las decisiones guiados por los científicos y especialistas que han informado a la ciudadanía.
Tras una reiterada alocución sobre la autoridad moral de su gobierno y las virtudes del pueblo de México, López Obrador aludió una vez más a sus adversarios que, según él, han tratado de dañarlo; arremetió contra lo que llamó el amarillismo de algunos medios de comunicación a los que acusó de sembrar miedo y difundir información falsa que se ha podido contrarrestar porque, dijo, su administración mantiene comunicación con el pueblo.
“Desde el principio, repito, fuimos los primeros en el mundo en atender todos los días este riesgo a la salud pública, informando desde hace tres meses, desde antes de las fases más difíciles, complicadas, decidimos que íbamos a guiarnos por la opinión, las recomendaciones de los técnicos, de los especialistas, de los médicos, de los científicos de la salud que ahora nos acompañan. No se ha actuado de manera apresurada, no hemos hecho caso a conjeturas, se ha actuado con profesionalismo, se ha hecho a un lado la politiquería, hemos enfrentado también a nuestros adversarios que buscan siempre dañarnos, aunque en ese propósito se dañe al pueblo. Hemos podido enfrentar el amarillismo de algunos medios de comunicación, la difusión de mentiras para atemorizar, noticias falsas; y no han hecho mella porque existe comunicación, hay mensajes de ida y vuelta entre pueblo y gobierno, no estamos separados del pueblo. Encabezo un gobierno del pueblo, para el pueblo y con el pueblo, no hay divorcio, por eso somos fuertes”, recalcó.
arg