Después de que el presidente Andrés Manuel López Obrador presentó datos de publicidad gubernamental otorgada a las revistas Letras Libres y Nexos, la primera le respondió que incurre en difamación para “desprestigiar voces críticas” y lo invita a abandonar su voluntad de distracción mientras el país enfrenta graves problemas. Por su parte, al abordar el caso de la Secretaría de la Función Pública (SFP) contra Nexos, Pen Internacional llamó al gobierno a detener el hostigamiento y las descalificaciones contra periodistas y medios.
En su conferencia de prensa, a propósito de una serie de preguntas sobre los 10 gobernadores que abandonaron la Conferencia Nacional de Gobernadores, el presidente mencionó a Reforma y, posteriormente, a Enrique Krauze, director de Letras Libres, del que dijo que “ahora está muy enojado porque su revista pues estaba subsidiada por el gobierno: se compraban como ocho mil revistas, que se llama la revista Letras Libres, cada mes, más otras cosas, se les compraban libros, servicios de todo tipo, una empresa editorial muy exitosa”.
A Krauze también lo llamó “intelectual orgánico” de algunos gobernadores, como el de Jalisco.
Y aprovechó, como si no estuviera preparado (“a ver, ¿no tendremos por ahí lo que se les entregaba? Vamos a ponerlo”), para proyectar un cuadro de las cifras de publicidad gubernamental que se le ha dado a Letras Libres y a Nexos, exposición que estuvo a cargo de Jesús Ramírez Cuevas, vocero presidencial.
López Obrador dijo que la gente no sabía que Krauze y Héctor Aguilar Camín tienen grupos que recibían apoyos especiales, “y revistas que el gobierno les compraba, suscripciones de millones de pesos y que siempre justificaban o guardaban silencio cuando se estaban cometiendo atracos al erario público (sic) y no hablaban de cómo se empobrecía al pueblo y cómo unos cuantos se hacían inmensamente ricos”.
Añadió que eso “es enseñanza y que cada quien se sitúe en el lugar que corresponda, y no simulemos, no engañemos, hagamos a un lado la hipocresía”. Y siguió al llamar a Reforma “boletín del conservadurismo”.
Ramírez Cuevas dijo que entre 2006 y 2018 Nexos obtuvo 87 millones de pesos de publicidad gubernamental, pero sumó 140 millones al sumar lo que ganó por otro tipo de contratos. Para Letras Libres, en el mismo periodo los datos son 74 millones 537 mil pesos y 90 millones 427 mil 263 pesos, respectivamente.
Y López Obrador siguió su ataque contra Reforma, los intelectuales e incluso contra el instituto de transparencia, además de mencionar que la banca de desarrollo otorgó a El Financiero un crédito por 100 millones de dólares.
Letras Libres dio respuesta a las declaraciones de López Obrador, con las que, según esa revista, el presidente incurrió, “de nuevo, en una difamación. Insiste en utilizar la tribuna presidencial, con todo el poder que ello confiere, para desprestigiar voces críticas y confundir a la opinión pública, haciendo creer a su audiencia que la publicidad oficial que reciben los medios es indebida”.
Desmintió lo anterior ya que la publicidad oficial ni señala falta de rectitud ni es ilegal, aunque se debe debatir sus reglas. De “malintencionada y falsa” llama la correlación que hace López Obrador en los casos de varias publicaciones críticas.
Letras Libres aclara que la publicidad oficial significó, hasta antes de este gobierno, sólo 2 de cada 10 pesos de sus ingresos, cantidad que ha sido pública, legal y legítima, con la que se ha dado espacio a voces críticas “de todas las tendencias políticas”.
Asimismo, Letras Libres dice que el presidente “haría bien en abandonar su voluntad cotidiana de distracción en un momento en el que el país enfrenta una situación crítica”, y señala desde los decesos por Covid-19, la crisis económica hasta la corrupción del círculo cercano del mandatario.
Por otra parte, en el asunto del conflicto que el gobierno federal, mediante la SFP, mantiene con Nexos, ayer Pen Internacional hizo un llamado al primero a “detener la constante estigmatización y sanciones desproporcionadas a medios de comunicación, acciones que promueven el silencio, la parcialidad y limitan el libre ejercicio de la libre expresión y el derecho a la información”.
Pen Internacional se refirió a las sanciones contra Nexos y su editorial Cal y Arena, que son una inhabilitación para hacer contratos con el gobierno y una multa de un millón de pesos, las que pidió aclarar.
La organización mencionó que las sanciones contra Nexos “se dan en un contexto hostil para el periodismo en México, después de una serie de confrontaciones y descalificaciones del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y altos funcionarios públicos hacia periodistas y medios de comunicación. En varias ocasiones, Pen ha señalado que tanto los funcionarios como el mandatario mexicano deben respetar el libre ejercicio del periodismo y el pleno ejercicio de todo ciudadano de tener acceso a información, más aún en uno de los países más peligrosos para ejercer el periodismo. De igual manera, deben respetar las posturas editoriales, las investigaciones, así como la crítica a su administración”.
Tras recordarle al Estado mexicano que más del 90 por ciento de los asesinatos contra periodistas están impunes, Pen Internacional le señaló que “la primera prioridad de las instituciones federales no debe ser otra que la búsqueda de los asesinos de más de cien periodistas asesinados por su labor informativa, y defender la libertad de expresión”.
De lo anterior, Pen Internacional llamó al gobierno federal a “detener el hostigamiento, la estigmatización y las descalificaciones de todo tipo a periodistas y medios críticos con el gobierno actual”, a evitar procesos que deriven en censura indirecta y a respetar acuerdos internacionales sobre el respeto al derecho de la libertad de expresión.