Luego del intento de sabotaje de la evaluación docente en Guerrero, la Coordinación Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG) se deslindó de este ataque, y su vocero, Walter Añorve, dijo que fue un “acto de solidaridad espontánea” por la falta de computadoras.
En entrevista con Ciro Gómez Leyva en Radio Fórmula, Añorve no quiso confirmar si los 70 maestros que intentaron al boicot pertenecen a la CETEG o si son de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).
Asimismo, afirmó que los docentes “no llevaban” la intención de sabotear el proceso ni que fuera una “acción premeditada ni de sabotaje”.
“Los compañeros que realizaron las acciones al interior, simplemente las hicieron ante la incapacidad que hubo, ante falta de computadoras. Es antipedagógico que esperaran ocho horas para que los demás pudieran hacer la prueba”, expuso.
Añorve afirmó que los 70 profesores se dieron cuenta de la falta de computadoras por lo que empezaron a reclamar a las autoridades. El vocero de la CETEG afirma que policías empezaron a golpear a sus compañeros.
“Empezó a haber caos ante la desesperación de compañeros al no tener respuesta certera con respecto a lo que había pasado. Pedían que se diera una reprogramación total. En ese sentido al intentar salir seguridad privada y policías agredieron al interior”.
Por ello, en un “acto de solidaridad espontánea” quienes se encontraban haciendo el examen abandonaron sus computadoras y también intentar salir del Fórum Mundo Imperial.
En tanto, la Secretaría de Educación Pública (SEP) rechazó que se haya golpeado a los maestros y detalló que este viernes mil 460 profesores realizarán la prueba y el próximo 11 de diciembre la harán mil 64.
mahy