Veintidós años después de cometer los delitos, el exsacerdote Carlos López Valdez recibió auto de formal prisión por violación y corrupción de menores, delitos que cometió cuando era prelado a mediados de los noventa.
La Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México (PGJCDMX) informó en un comunicado la detención de López Valdez, en Jiutepec, Morelos, la cual se realizó en cumplimento de la orden de aprehensión que giró el juez 55 Penal del Reclusorio Preventivo Varonil Oriente.
De acuerdo con el expediente 244/2008, el imputado habría violado por cuatro años de un menor de edad “valiéndose de su investidura de sacerdote”.
El ilícito se cometió en 1994 cuando el prelado “comenzó a someter a su víctima, a quien realizó tocamientos de índole sexual y violaciones”, mismos que se prolongaron hasta principios de 1998, pero fueron denunciados hasta agosto del 2007.
Una vez que el Tribunal Eclesiástico de la Arquidiócesis Primada de México se enteró del caso, inició un juicio canónico contra Carlos López, al tiempo que notificaba a la Congregación de la Doctrina de la Fe en la Santa Sede.
En 2010, las autoridades católicas dieron su sentencia definitiva: la exclusión del ejercicio sagrado del ministerio y la prohibición de predicar o ejercer algún puesto directivo o administrativo en el ámbito pastoral.
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