En una nueva revelación periodística que afecta al actual gobierno, el periodista Carlos Loret de Mola informó que el ex secretario de Seguridad Pública y actual candidato de Morena a gobernar Sonora, Alfonso Durazo, posee nueve propiedades no declaradas por un valor de 214 millones de pesos.
En un reportaje difundido el 20 de mayo, Loret detalló que su investigación arrojó que Durazo ha ocultado que es dueño de nueve propiedades en México y en Arizona, Estados Unidos, por medio de ponerlas a nombre de su familia o de usar como tapadera una empresa en la que son accionistas su esposa y sus dos hijos.
Según Loret, Durazo creó la empresa Inmobiliaria Alta Sierra S.A. de C.V., de la que él se desempeñó como único administrador y que se usó para realizar las compras. Como accionistas aparecen su esposa y sus hijos.
Estas propiedades no son parte de la declaración de bienes a que Durazo, como servidor público, estuvo obligado durante su encargo como titular de la SSPC. Entre dichas propiedades se encuentran un edificio, una casa en Bahía de Kino, un rancho de mil hectáreas y locales comerciales.
De acuerdo con la investigación, la casa en Bahía de Kino antes perteneció a Amado Carrillo Barragán, hijo del narcotraficante Amado Carrillo Fuentes, el famoso “Señor de los Cielos”.
A pesar de que es posible que el patrimonio de Durazo se corresponda con su nivel de ingresos, ya que ha tenido cargos de alto nivel durante 20 años, eso no quita lo incorrecto de que haya mantenido dichas propiedades sin declarar.
Las propiedades aparecen a nombre de la mencionada inmobiliaria como patrimonio fijo y fueron adquiridas entre 1994 y 2016. Ello, a pesar de que supuestamente una inmobiliaria adquiere propiedades para luego comercializarlas. No ha ocurrido. La inmobiliaria conserva todas las propiedades.
Loret señala que en 2018 Durazo aceptó ser propietario de dos cuentas bancarias a nombre de tal empresa, fue su administrador único, pero a pesar de los vínculos directos, no declaró la propiedad de los bienes inmuebles.
Es decir, un método similar al empleado por Manuel Bartlett Díaz, director de la Comisión Federal de Electricidad, vinculado con 23 propiedades a nombre de su pareja o miembros de su familia.
De hecho, un método también análogo al que la Fiscalía General de la República achaca al gobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca, respecto al menos 12 casas, predios y ranchos.
La diferencia es que mientras ni a Durazo ni a Bartlett, se les investiga judicialmente, sobre Cabeza de Vaca, miembro de la oposición, ya pesa una orden de aprehensión.
