Francia “desaconseja enérgicamente” a sus ciudadanos viajar a México

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Luego de que en la capital de México y su zona metropolitana se decretara (con al menos dos semanas de retraso) el regreso al “semáforo rojo” por el intenso incremento en los contagios de COVID-19, la embajada de Francia pidió a sus ciudadanos no venir a nuestro país.

En tanto, el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell negó que sea necesario restringir la entrada de viajeros provenientes de Inglaterra, no obstante el descubrimiento de una nueva cepa del virus, que resulta hasta 70% más contagiosa.

El embajador francés en México, Jean Pierre Asvazadourian, dijo que la “tasa de ocupación hospitalaria es preocupante” ya que desde hace varias semanas “la epidemia se ha propagado a gran velocidad. Muchos estados del país están en alerta máxima ya”.

Así, llamó a sus connacionales a evitar viajar a México y a otros países, al tiempo de observar las medidas recomendadas de distanciamientos social e higiene. “De ello dependen nuestras vidas, las de nuestros seres queridos y de los demás. Más que nunca debemos mostrar civilidad”.


El diplomático pidió tener paciencia, en vista de que ya se han iniciado las labores para vacunar a la población mexicana, no obstante que según el plan del gobierno encabezado por Andrés Manuel López Obrador, será hasta marzo del 2022 que la totalidad de la población esté vacunada, según los cálculos más optimistas.

“Ahora debemos ser pacientes, al tiempo que cuidemos de nosotros mismos y de los que nos rodean”, dijo.

A su vez, en comunicado de prensa, la embajada señaló que “no se recomiendan los viajes internacionales a menos que exista una razón de peso. Ciertamente no hay nada que impida a un ciudadano francés viajar a México; sin embargo, las condiciones sanitarias han empeorado y se desaconseja enérgicamente viajar a México desde Francia”.

Este martes México reportó que se han registrado ya 119 mil 495 muertos por COVID-19, prácticamente el doble del peor escenario calculado por Hugo López-Gatell a principios de año.

Asimismo, hace unos días Inglaterra informó del descubrimiento de una nueva cepa del virus, altamente contagiosa y al parecer, más peligrosa. A pesar de ello, el subsecretario Gatell, tal como lo hizo en febrero pasado con la primera cepa de COVID-19, desestimó este nuevo riesgo, pues dijo que “no hay evidencia” que se trate de un peligro adicional a la salud.

Hay que recordar que en reiteradas ocasiones dijo que “no hay evidencia científica” de que el uso del cubrebocas fuera necesario para evitar contagios y ante la imparable ola de muertes, hace unas semanas empezó a recomendarlo.

La mañana del 22 de diciembre, en su cuenta de Twitter, López Gatell publicó que “no hay evidencia científica de que la mutación del virus SARS-CoV-2 represente una amenaza adicional a la salud pública”.

Dijo también que las medidas físicas de restricción son “poco efectivas” para evitar contagios, a pesar de que los países que han cerrado sus fronteras, como Nueva Zelanda y Australia, han reportado ya cero casos de contagio desde hace semanas.

“La OMS explícitamente desaconseja el cierre de vuelos provenientes del Reino Unido. El Reglamento Sanitario Internacional (2005) estableció un cambio radical en las prácticas de sanidad, derivado de décadas de conocimiento científico, e identificó que prácticas como los mecanismos de restricción físicos (muros y cierre de fronteras) son poco efectivas”.

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