Entre las empresas relacionadas con las obras de la Línea 12 del Metro, en la que este lunes se reportó un fatal siniestro que ha costado 24 vidas, destacan ICA y Carso Infraestructura y Construcción S. A. (CICSA), que también tienen actualmente a su cargo otras importantes construcciones, como el Tren Maya. El presidente Andrés Manuel López Obrador ha alabado a ambas empresas.
Para la construcción de la Línea 12 del Metro, la obra mayor de Marcelo Ebrard como jefe de Gobierno del Distrito Federal, el grupo que ganó la licitación fue el que integraban tres compañías principalmente: ICA, CICSA y Alstom.
Sin embargo, apenas dos años después de la celebrada inauguración de la Línea en 2012, con la asistencia de personajes de la política y los negocios en el país, la obra presentó serios problemas en su funcionamiento y en su seguridad, así como económicos por el sobrecosto que implicó,
En 2014 el servicio de 12 de las 20 estaciones de la Línea 12, que tuvo un costo de 26 mil millones de pesos, debió ser suspendido durante varios meses (hasta el año siguiente) para realizar diversos ajustes y correcciones, sobre todo en las vías, para intentar garantizar que los traslados fueran realizados con seguridad.
Desde entonces se mantuvieron serios cuestionamientos sobre los trabajos que realizaron las compañías constructoras que tuvieron a su cargo la Línea 12, de forma destacada ICA y CICSA.
Las obras tuvieron un costo de unos 2 mil millones de pesos, mil 200 para el tramo elevado y 800 para el subterráneo. Al primero corresponde la trabe que colapsó y provocó la tragedia.
El grupo constructor, en el que participaban ICA y CICSA, reclamó adeudos e intereses por la obra por 6 mil millones de pesos, pero el Tribunal Superior de Justicia capitalino determinó que sólo se le otorgaran 4 mil millones. Pero, al mismo tiempo, se le ordenó pagar mil 700 millones por las obras mal realizadas y 400 millones más por la rehabilitación de la línea.
Posteriormente, como resultado de los daños por el sismo del 19 de septiembre de 2017, vecinos de las estaciones de superficie de la Línea 12 denunciaron daños en diversas partes de la infraestructura del Metro, que incluso provocaron un descarrilamiento.
Tras el derrumbe del puente de la Línea 12, ICA se deslindó del siniestro al afirmar que no participó en la construcción del tramo donde ocurrió. Este ha sido atribuido a CICSA.
Según información de Reforma, CICSA, pese al antecedente de la Línea 12, participa actualmente en la construcción del tramo 2 del Tren Maya, la obra emblemática del actual gobierno.
La construcción de dicho tramo es compartido por la empresa de Grupo Carso con la española FFC, obra por la que facturarán 18 mil 553 millones de pesos. Obtuvo el contrato por licitación pública internacional.
La otra compañía responsable de la Línea 12, ICA, tiene a su cargo la construcción del tramo 4 del Tren Maya, obra que obtuvo por adjudicación directa por contar con el derecho de vía de la carretera Kantunil-Cancún,, con un costo de más de 27 mil millones de pesos, que corre de Izamal, Yucatán, hasta Cancún, Quintana Roo.
Cuestionado sobre la permanencia de las dos compañías citadas en las obras del Tren Maya después de la tragedia en la Ciudad de México, el Fondo Nacional de Fomento al Turismo se ahorró comentarios y afirmó que respetará tiempos y resultados de las investigaciones al respecto. Se limitó a manifestar su pesar por lo ocurrido en la Ciudad de México.
Apenas el pasado 5 de marzo el presidente Andrés Manuel López Obrador estuvo en Uayma, Yucatán, para supervisar las obras del Tren Maya. Allí hizo una apología de ICA: “Nos acaban de informar que se va avanzando. Son alrededor de 250 kilómetros y esta obra está a cargo de ICA, que es una empresa seria, responsable, que además ahora está bien dirigida por Guadalupe Phillips, una mujer trabajadora, recta, íntegra, un ejemplo de lo que deben ser los responsables de las empresas constructoras de nuestro país.
“Por eso tenemos confianza de que, como lo mencionó Guadalupe, se va a cumplir en tiempo, se va a hacer bien la obra, es decir, con calidad y de acuerdo al presupuesto estimado”. Esto, pese al antecedente de la Línea 12.
Phillips había dicho en el mismo acto: “Nosotros en ICA estamos muy orgullosos de la historia que tenemos en la construcción de infraestructura de este país, y estamos todavía más orgullosos de ser parte de este proyecto emblemático que va conectar a la península y que realmente va a mejorar la vida de sus habitantes”.
El 17 de abril López Obrador se reunió en Palenque con Carlos Slim para hablar de los avances del Tren Maya. Entonces tuiteó: “Desayuné en Palenque con Carlos Slim porque estamos evaluando el avance en la construcción del Tren Maya y su empresa tiene un tramo a su cargo. También hablamos de otros temas y le mostré la ceiba más grande que tengo en la quinta”.
En marzo el presidente apresuró a los grupos constructores que participan en las obras para que el Tren Maya sea inaugurado en 2023, para que entreguen en tiempo, calidad y sin sobrecostos.
En diciembre de 2020 dijo lo siguiente sobre las obras y la empresa de Slim: “Muchas gracias de nuevo a los representantes de Carso, a quienes están a cargo de la obra. Es importante, es una recomendación respetuosa, fraterna, de que se abran más tramos. Entre más tramos haya, más se avanza. Eso lo saben muy bien”.