Al presentar este jueves el Plan Conjunto de Atención a Instalaciones Estratégicas de Petróleos Mexicanos (Pemex), el presidente Andrés Manuel López Obrador informó que un pilar de dicho plan es la intervención de elementos de la Marina y el Ejército, Pemex y policía federal para combatir el robo de combustible o “huachicoleo”.
En su conferencia de prensa matutina, López Obrador dijo que estas acciones se pusieron en marcha desde el pasado 20 de diciembre, en conjunción con la Secretaría de Marina y la Secretaría de la Defensa Nacional.
El director de Pemex, Octavio Romero Oropeza, dijo que “se intervino el sistema de monitoreo y control de los ductos en Pemex”, lo cual implicó la remoción de varios funcionarios. Al respecto, López Obrador dijo que se detectaron áreas e instalaciones en donde el personali sindicalizado de Pemex no dejaba entrar a las autoridades de la paraestatal.
“Hay información de que en algunas áreas no podía entrar Pemex, la autoridad. Eran áreas reservadas, o estaban conducidas o administradas por trabajadores sindicalizados. Eso ya se resolvió. Se les informó que Pemex y el Gobierno Federal iban a cuidar instalaciones estratégicas”.
De acuerdo con Romero Oropeza, durante el 2018 las pérdidas para Pemex por robo de combustible llegaron a los 66, 300 millones de pesos, mientras que en 2017 se perdieron 50 mil 100 mdp y alrededor de 30 mil mdp en el 2016.
También presente en la conferencia de prensa, el titular de Sedena, Luis Crescencio Sandoval, informó que “tenemos 73 instalaciones donde SEDENA y SEMAR tienen presencia de seguridad periférica a la instalación. Después del análisis se determinaron 58 instalaciones a las que se debería dar atención”, y que son seis refinerías, 39 terminales de despacho y almacenamiento, estaciones de rebombeo y el Centro de Control México.
Serán 15 dependencias del gobierno federal las que tendrán participación en este plan de combate al robo de combustible.
El presidente de la República dijo que el robo de combustible a Pemex consta de la ordeña de ductos, robo de pipas y distribución ilegal. El robo se da con la complicidad de funcionarios de la dependencia, aseguró.
“La mayor parte tiene que ver con un plan que se opera con la complicidad de autoridades y con una red de distribución”. Aseguró que sólo el 20% por ciento corresponde al robo de pipas, que el resto de las pérdidas se da por medio de corrupción al interior de Pemex.
“Desde hace tres sexenios sabían del robo, pero desde el 2000-2003 se aceptaba que se robaban 12 mil millones de pesos y ahora estamos hablando de más de 60 mil millones de pesos, es decir, ha ido creciendo sin que se haga nada”.
Por su parte, el encargado de despacho de la Procuraduría General de la República (en transición a Fiscalía General de la República) Alejandro Gertz Manero, dijo la red de robo de combustible estaba a cargo de funcionario de Pemex, quienes ya fueron removidos de sus cargos e investigados. Al momento, señaló, son tres personas las que están siendo investigadas.
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