Claramente desbordada por la inminente deportación masiva de migrantes ilegales en Estados Unidos, la presidenta Claudia Sheinbaum prácticamente lanzó un ruego al futuro presidente Donald Trump para que no envíe también a México a migrantes de otras nacionalidades.
Si bien somos solidarios y generosos, pedimos que no nos manden deportados de otros países porque no tenemos recursos, dijo abiertamente.
Al tiempo, intentó minimizar la muy probable intervención norteamericana para combatir a los cárteles de la droga, luego de que Trump anunciara que los declarará como “organizaciones terroristas extranjeras”.
“En caso de darse una deportación, lo que nosotros estamos planteando es que si bien México es solidario, generoso, con todas las nacionalidades, nosotros pedimos que… nosotros recibimos a las y los mexicanos, pero que debe haber una manera de que haya una repatriación de las otras nacionalidades a sus países de origen”, pidió.
Y en seguida, insistió:
“Porque México, repito, es solidario, pero nosotros pedimos que haya el recurso necesario para que puedan ser repatriados a sus países”.
Así, Sheinbaum dejó en claro que para su gobierno es una preocupación mayúscula verse de repente desbordado por miles de migrantes de diversas nacionalidades expulsados de Estados Unidos, sobre todo porque ni siquiera hay recursos ni estrategia para recibir a los mexicanos, según se desprende de declaraciones de gobernadores de estados fronterizos hechas al periodista Carlos Loret de Mola.
Se recordará que durante la primera presidencia de Trump se impuso al gobierno de Andrés Manuel López Obrador fungir como sitio de espera para los migrantes que solicitaban asilo. El gobierno de Trump difundió el programa “Quédate en México” y obtuvo del gobierno mexicano la militarización de la frontera y la contención de caravanas de migrantes que transitaban por el país.
Durante los pocos meses del gobierno de Sheinbaum ella ya se ha visto orillada a frenar caravanas migrantes, a prometer contención de la migración y a ofrecer, una y otra vez, colaboración y coordinación.
Además, ante cada declaración contundente de Trump ha tratado de hacer control de daños. Este lunes dijo que no había que “engancharse” respecto a ciertos temas. En particular, lo dijo respecto a la muy probable intervención norteamericana para perseguir a carteles de la droga.
Este domingo, Trump volvió a decir que firmará un conjunto de órdenes ejecutivas: ordenará cerrar las fronteras, realizará masivas deportaciones de extranjeros y declarará a los carteles de la droga como organizaciones terroristas.
Dijo que las deportaciones masivas serán parte del combate a las “pandillas criminales”, pero, de acuerdo al historial militar de Estados Unidos, la declaratoria de terrorismo también implica la posibilidad de intervenir en otros países.
“En mi primer día de regreso en la Oficina Oval firmaré una serie histórica de órdenes ejecutivas para cerrar nuestra frontera a los migrantes ilegales y detener la invasión de nuestro país. Ese mismo día comenzaremos la operación de deportación más grande en la historia de Estados Unidos, más grande incluso que la del Presidente Dwight D. Eisenhower”, dijo y agregó que “impondremos todo el poder de las fuerzas del orden federales: ICE, Patrulla Fronteriza… la DEA, el FBI. Eliminaremos a las bandas de migrantes y criminales que están matando y violando a nuestros ciudadanos. ¡Vamos a echarlos!”.
Al respecto, Sheinbaum aseguró que “estamos preparados” para recibir a los mexicanos deportados. Que existe una estrategia que se coordina con todos los gobernadores de la frontera.
“Para aquellos mexicanos y mexicanas: que si hay deportaciones, lleguen a México, estamos preparados. Entonces, Rosa Icela está coordinando este trabajo, lo está coordinando con toda las Secretarías de Estado, y lo está coordinando también con los Gobernadores de la frontera.
“Entonces, el objetivo es que puedan llegar a México, que tengan una buena recepción, que no se sientan abandonados, que sepan dónde llegar. Si es necesario que se trasladen a sus estados, los podamos ayudar a trasladarse, que tengan todos los programas sociales de inmediato, que haya bolsa de trabajo para que puedan tener la posibilidad de trabajar en México, que haya teléfonos para que puedan comunicarse con sus familias. Entonces, en caso de haberlo, nos estamos preparando para eso”.
La semana pasada Carlos Loret de Mola informó que en una reunión con gobernadores Sheinbaum les pidió “estar preparados” pero no habló de estrategias ni mucho menos de recursos. Este lunes, aseguró que el plan existe.
Sobre la declaratoria de organizaciones terroristas, la mandataria dijo que Trump “nunca habla de la intervención a México”, lo cual es falso, ya en esa declaratoria va implícita la posibilidad de actuar en territorio extranjero, como lo ha hecho Estados Unidos en muchos países con ese argumento.
“Hay que trabajar para mantener una buena relación, pero no hay que engancharse en los temas y sencillamente escuchar bien lo que está diciendo. Y, así como tuvo una buena relación de respeto con el Presidente López Obrador, estoy convencida de que vamos a tener una buena relación y en el momento en que tengamos que platicar, ya sea personalmente o los equipos, se va a hacer así”, minimizó.
Se recordará que hace unas semanas en la revista Rolling Stone se habló de un supuesto plan de Trump para realizar una “invasión suave” a México para combatir a los grupos delictivos que trasiegan fentanilo.
La revista norteamericana citó “una fuente cercana a Trump” que dijo que el futuro presidente ha hablado de enviar agentes encubiertos para secuestrar y/o asesinar a los líderes de los cárteles. También realizar ataques con drones, implementar una guerra cibernética en contra de los cabecillas, así como enviar asesores militares a México.
ofv