Los inversionistas buscan la certidumbre y no hay nada peor que cambiar las reglas del juego, afirmó el embajador de Estados Unidos en México, Christopher Landau, durante un encuentro organizado por la Confederación de Cámaras Industriales. Además, dijo que en México se ven “cosas desalentadoras” para la inversión extranjera.
En el encuentro, el diplomático dijo sobre las dificultades para la inversión que “una parte esencial para mí como embajador es tratar de arreglar esos problemas cuando se presentan y tratar francamente de fomentar la inversión de mis connacionales, pero tampoco les puedo mentir, y tampoco les puedo decir que es un momento oportuno para invertir en México si se ven cosas desalentadoras para la inversión extranjera”.
Pese a que está el video donde se escucha al político afirmar lo anterior, posteriormente publicó en su cuenta de Twitter una aclaración: “Se está reportando que yo comenté esta mañana a la CONCAMIN que no es momento oportuno para invertir en México. Eso no lo dije. Lo que dije es que los inversionistas buscan la certidumbre, y que no hay nada peor que cambiar las reglas del juego”.
En la reunión virtual el diplomático dijo que “este es un momento dorado para México para atraer inversión extranjera y espero que no lo desperdicien, francamente, porque para mí sería una tragedia histórica de perder esa oportunidad y esa ventaja no va a estar abierta mucho tiempo más. Yo creo que hoy, mientras estemos hablando nosotros, empresarios en todo el mundo están revaluando sus cadenas de suministro”.
Asimismo, Landau mencionó que has ciertos aspectos preocupantes en algunos sectores, como en el sector energético, en el que existe incertidumbre sobre si el gobierno actual respetará lo que se ha hecho del pasado:”Se ven cosas muy desalentadoras para la inversión extranjera y en varios sectores obviamente hemos visto cosas preocupantes”.
Añadió una observación sobre el panorama de las inversiones en México: “México debería de ser un destino natural, dado sobre todo el nuevo T-MEC, que entra en vigor en menos de una semana. Pero, que yo sepa, no hemos visto una gran ola de nueva inversión en México; al contrario, ha sido más o menos un gran esfuerzo preservar las inversiones ya existentes”.
Reconoció que México tiene derecho de cambiar sus políticas económicas y sociales, aunque señaló que “también hay que reconocer que esos cambios puedan tener efectos muy negativos en cuanto a la inversión doméstica y extranjera”.
Y recordó: “El gobierno de México dijo que en varios casos no estaba de acuerdo con algunas de las políticas de gobiernos anteriores, pero que se iban a respetar las promesas que ya se habían hecho en el pasado, las reglas del juego que se habían establecido. A lo mejor no las iban a expandir o profundizar, pero que las iban a respetar. Para mí, algunas de las acciones de estos últimos meses, sobre todo en el sector energético, han creado incertidumbre sobre esa promesa del gobierno de respetar lo que se hizo en el pasado y de no cambiar las reglas del juego”.