Desde diversos ámbitos se le pide al Gobierno de México, encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, que enfrente con seriedad y responsabilidad las consultas solicitadas por Estados Unidos y Canadá sobre política energética en el marco del T-MEC.
En ese marco, el pasado jueves Ken Salazar, embajador de Estados Unidos en México, en Twitter, se ocupó del asunto en un par de mensajes. En el primero habló de los beneficios del T-MEC y recordó el apoyo de los dos partidos y de la iniciativa privada de su país con el objetivo de “mejorar el comercio, salvaguardar derechos de los trabajadores y proteger el ambiente”.
Y añadió sobre la disputa acerca de la política energética mexicana: “El mecanismo de consulta es un elemento fundamental del TMEC que beneficia a los tres países al permitirnos resolver disputas rápidamente. Debemos abordar esta disputa del TMEC sobre energía con determinación y seriedad para una resolución expedita”.
La Cámara de Comercio Internacional también se pronunció al respecto: “Esperamos que el Gobierno de México tome este asunto con seriedad y que haya voluntad política para poder resolver estas irregularidades mediante el diálogo, la buena voluntad y el compromiso con la legalidad para evitar que la economía de nuestro país sufra afectaciones”.
Otro llamado fue hecho por Carlos de Maria y Campos, vicepresidente del Comité de Energía de la Canadian Chamber of Commerce en México, para que México atienda “con toda seriedad” las consultas solicitadas tanto por Estados Unidos como por Canadá.
Pero también advirtió sobre el proceso que inicia entre los tres países que “por el impacto que puede tener en la economía no es como para reírse”.
De Maria y Campos señaló: “Nos preocupa la ligereza con la que lo ha tomado el gobierno y, ya de forma extralegal, la reacción del presidente burlándose de Estados Unidos es algo que no se había observado nunca en la historia de este país”.
El pasado miércoles también el diputado mexicano Ildefonso Guajardo, quien fue uno de los principales negociadores del T-MEC, también convocó a enfrentar este proceso con responsabilidad.
“Afortunadamente los paneles de controversias, nos dan la oportunidad de corregir el rumbo, de sentarnos a dialogar de forma responsable con nuestros principales socios comerciales”, escribió en Twitter Guajardo.
La senadora Xóchitl Gálvez hizo la misma solicitud: “Señor Presidente, en vez de burlarse de la inconformidad de Estados Unidos y Canadá por el posible incumplimiento del #TMEC, atiéndalo con seriedad”.
El politólogo Sabino Bastidas comentó que el asunto planteado “es un tema muy delicado, y creo que no debemos tratarlo con esa frivolidad de Chico Che y ‘a mí no me importa y uyuyuy, qué miedo tengo, no me hace nada’. Eso se me hace mucho más complicado, mucho más político y mucho más grave porque este asunto técnico el presidente López Obrador lo va a politizar en cada una de sus etapas”.
El pasado miércoles, tras el anuncio de que Estados Unidos solicitó consultas a México, en su conferencia de prensa López Obrador tuvo la siguiente ocurrencia: “Espérense, espérense; vamos a terminarla con esto de que nos van a llamar a cuentas para que expliquemos la política energética de nuestro país, que nos tiene muy preocupados. A ver si consigues a mi paisano Chico Che y ponemos esa de ‘Uy, qué miedo’. A ver, ponla de una vez, si la tienes”.
Después su equipo de comunicación proyectó el video de la canción en la pantalla del salón, mientras López Obrador reía y hacía ademanes.
