Los reporteros que cubren el Congreso repudiaron las actitudes del diputado morenista Mario Rafael Llergo, quien agredió verbalmente a una compañera por cuestionarlo; después, el coordinador de la bancada de Morena les envió unas tortas, las que también rechazaron por ser una falta de respeto.
El jueves pasado, mientras el legislador de Morena presentaba una denuncia contra Lorenzo Córdova, consejero presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), en una conferencia de prensa realizada en la Cámara de Diputados, ofendió a la reportera Margarita Nicolás, de Cadena Rasa, que le hizo una pregunta sobre su acusación, lo que molestó al legislador.
Como respuesta a la periodista, con mala fe Llergo le dijo: “¿Usted trabaja en el INE?, ¿no?”. Nicolás le replicó: “No; yo soy periodista y tengo un medio”, y el diputado interrumpía con insolencia y desfachatez: “Bueno, no. Pregunto nada más por el interés, no por otro… Sólo preguntaba, nada más. Perdón, yo estoy nada más aquí para responder”. Y en la desvergüenza, Llergo afirmó: “Yo no le insinué absolutamente nada”.
Otra periodista tomó la palabra para aclararle al diputado morenista: “Ante la falta de argumentos de esta denuncia (la de Llergo), es obvia la pregunta de la compañera. La respalda la fuente de la Cámara de Diputados, y es una falta de respeto que le pregunte si trabaja en el INE. Es una falta de respeto”.
En el video de la Cámara de Diputados se escucha a un reportero decir: “Morena siempre está insultando a todo el mundo, y ahora ya hasta contra nosotros”.
Cuando Nicolás explicaba la importancia de la empresa donde trabaja, con sorna Llergo le dijo: “Qué bueno. Felicidades”.
Frente a la ofensa, los reporteros manifestaron su molestia y, entre gritos de protesta (“¿por qué los de Morena odian tanto al INE?”, todavía alcanzó a cuestionar un comunicador), procedieron a retirarse de la conferencia de prensa del morenista.
Después, en tareas de control de daños, Ignacio Mier, coordinador de la bancada de Morena, se acercó a Nicolás, la abrazó y reconoció unión de grupo y la solidaridad ante “lo que pareció una agresión”, y dijo que valora el trabajo de los medios de comunicación más allá de la línea editorial.
Pero el numerito de la fracción parlamentaria de Morena no acabó allí, sino que faltaba que le diera rienda suelta a su mentalidad acarreadora. Así, tras al ataque a los periodistas del Congreso, Mier también quiso arreglar el desaguisado con un generoso envío de tortas a la sala de prensa. Sólo faltó el frutsi correspondiente.
Sin embargo, la acción de Mier fue reprobada ampliamente por los reporteros, quienes escribieron la leyenda “La fuente no se toca” y “No a la chayotorta” sobre los empaques de unicel en los cuales iban los obsequios gastronómicos de Morena, que tuvieron que ser retirados sin ser degustados.
Todavía Morena publicó un boletín donde dice que el tono de Llergo en ningún momento “fue peyorativo y mucho menos denostativo”. Pero allí están los videos con las expresiones del diputado. Y la bancada fue más allá: llamaron a los periodistas a la tolerancia.
En Twitter Llergo, quien es representante de Morena en el Consejo General del INE, donde ha dado repetidas muestras de ignorancia e impertinencia, agradeció el acompañamiento a su coordinador y a sus compañeros de partido. Escribió que a la representación de Morena en el INE “no le caracteriza la estridencia”. Y no hizo ninguna referencia ni presentó ninguna disculpa por su agresión contra los periodistas.