jueves 21 noviembre 2024

Movimiento Ciudadano también impugnará reforma judicial y leyes secundarias

por etcétera

Movimiento Ciudadano presentará una acción de inconstitucionalidad contra la reforma judicial y las leyes secundarias que la han acompañado por los vicios procedimentales que han ocurrido durante su aprobación, indicó Clemente Castañeda, el coordinador de la bancada naranja en el Senado de la República.

Días después de la “tómbola” que definió cuáles cargos del Poder Judicial de la Federación estarán en juego en junio próximo y de la aprobación y publicación en el Diario Oficial de la Federación de cambios a la legislación para realizar la elección, Castañeda hizo el anunció de la impugnación que su partido presentará al respecto.

“Todos estos procedimientos que se han hecho sobre las rodillas, empezando por la propia reforma, son impugnables. Aprovecho para anunciar que, el día de mañana, Movimiento Ciudadano, como partido político, presentará también una acción de inconstitucionalidad. Creo que la Corte tendrá que empezar a decidir sobre las impugnaciones que se presentarán a lo largo de estos días”, declaró el senador de MC.

Ya con anterioridad el PAN y el PRI han presentado sus impugnaciones contra la reforma judicial.

Castañeda comentó que también irán contra la “tómbola” realizada el sábado pasado, debido a que el acuerdo que está en el origen de esa insaculación “está viciado”, debido a que “es una medida que inicia o le da continuidad al proceso de renovación del Poder Judicial, sin que haya concluido la propia reforma al Poder Judicial (…) Esta reforma tiene todavía discusión hoy en día en la Cámara de Diputados y estará publicándose posteriormente. Ah, pero eso sí: como tenían prisa, el Senado de la República se adelantó a tener o hacer un bochornoso espectáculo sin ninguna base legal más allá de un acuerdo de la mesa directiva del Senado”.

Entre otras fallas procedimentales en que se ha incurrido en el atropellado trámite de la reforma judicial Castañeda indicó la pretensión de emitir la convocatoria cuando aún no se ha terminado el proceso legislativo requerido. Eso fue considerado por el legislador como una contradicción más de una reforma “hecha a la carrera, sobre las rodillas, sin respetar plazos legales y, por supuesto, sin respetar la dignidad y la integridad de personas trabajadoras del Poder Judicial como si todas fueran necesariamente malas juzgadoras”.

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