El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador desestimó el amago de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) de realizar nuevas movilizaciones y bloqueos a la Cámara de Diputados, durante la discusión de las leyes secundarias de la reforma educativa y confió que las negociaciones lleguen a buen término.
El mandatario descartó cualquier posibilidad de confrontarse con el magisterio disidente y afirmó que no caerá en la trampa de la descalificación; consideró que siempre le apostará al diálogo y será la sociedad la que se encargue de rechazar cualquier exceso, y corregir el rumbo cuando las causas que se defienden no sean justas.
“Creo que eso da mejores resultados, no confrontarnos en ningún caso, que todos asumamos nuestra responsabilidad, que como se decía antes, que la prensa se corrija con la prensa, que los movimientos sociales se corrijan con los movimientos sociales, que el contrapeso sea la misma opinión pública, que se procure no usar la fuerza. Parece idealismo, ingenuidad incluso, pero no, no. Ya en estos tiempos que hay mucha madurez en los ciudadanos, en la gente, cuando se exagera, cuando no hay razón, cuando no se argumenta, cuando no se lucha por una causa justa, la misma gente, el mismo pueblo corrige. Entonces, todos tenemos que autolimitarnos, todos, no pasarnos”, sostuvo.
Afirmó que actuará con prudencia y sin “engancharse” con los maestros que quieran manifestarse; señaló que debe prevalecer el sentido común y la tolerancia con quienes tengan una posición divergente con lo que se está proponiendo en la reforma educativa, sin embargo, insistió en que ésta tiene como finalidad el interés general y confió en que por esta vía se puedan conseguir los equilibrios necesarios.
“Si cualquier acción se responde con uso de la fuerza, con insultos o con agresiones, pues entonces nos empantanamos, nos entrampamos y la autoridad no debe de engancharse, debe de actuar con prudencia. Hay cosas en donde debe prevalecer más el sentido común, el buen juicio. A veces, como dicen, no es posible esto, está exagerado, no tiene sustento, no hay pruebas, son intereses particulares, no son intereses generales, sí, pero el respeto, la tolerancia, la libertad de manifestación, equilibrar todo eso y llegar a un acuerdo”, indicó.
López Obrador negó que se vayan a hacer “concesiones graciosas” a la CNTE y aseguró que únicamente se busca que no se margine al magisterio de este proceso como se hizo en el pasado. Justificó su planteamiento de que se otorguen plazas automáticas a quienes egresan de las normales porque, desde su perspectiva, estas escuelas fueron creadas para la formación docente y son una parte fundamental de la lucha por una educación popular. Insistió en que fortaleciendo a las normales, no hará falta contratar a profesionales de otra formación para ocupar las plazas magisteriales.
“No es una concesión graciosa. Primero, es una lucha de los maestros de tiempo atrás, el que se respeten las normales, porque había una política de cerrar normales, desaparecerlas, muchas fueron eliminadas con la excusa de que se formaban subversivos, rebeldes, rojillos, todas esas manifestaciones. Y se luchó porque se mantuvieran las escuelas. Ahora nosotros llegamos a la conclusión de que hacen faltan las escuelas normales y que se van a fortalecer para la formación de los maestros, y que de esa forma no tendríamos que contratar a otro tipo de profesionales, que para eso son las normales, siempre ha sido así”, sentenció.
arg