Ante las quejas y críticas que la carta responsiva para el regreso a clases desató en redes sociales y medios de comunicación, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que esa decisión no tuvo que ver con él, sino que fue una decisión de “abajo”.
Con ello, echó toda la responsabilidad de esa polémica medida a la secretaria de Educación, Delfina Gómez, quien en días pasados, durante una conferencia mañanera, insistió en la necesidad de que los padres de familia firmen una “carta compromiso” para que los niños regresen a clases a partir de este 30 de agosto.
Este 17 de agosto, AMLO dijo que la carta “no es obligatoria”, sin embargo, la SEP y la titular de esta dependencia, dijeron en días pasados que sí lo es.
De esta manera, y tal como acostumbra, el presidente desestimó públicamente una decisión tomada por un miembro de su gabinete, con lo que evidencia la falta de comunicación y coordinación que existe dentro del gobierno federal.
Según el presidente, el que la SEP haya pedido una carta responsiva, es herencia de la concepción burocrática y autoritaria que se “heredó del periodo neoliberal”.
“Entonces ustedes creen que yo tuve que ver con la carta. Pues no, fue una decisión abajo”.
Agregó que nadie le consultó. Y que si se le hubiera consultado, hubiera dicho que no, porque “somos libres, prohibido prohibir”.
Hace unos días, Delfina Gómez declaró en la mañanera que para el regreso a clases se estaba pidiendo a los padres que firmaran una “carta de aceptación”, que es, dijo, donde se autoriza a que el niño esté dentro de “lo que es la parte de asistencia a la escuela” (sic).
Esta carta, que se divulgó ampliamente en redes sociales, fue interpretada por miles de internautas como una manera en que el gobierno se desentiende de lo que le pueda pasar a los niños que asisten a clases, dejando en manos de los padres de familia el control de los posibles contagios y aceptando el riesgo implícito.
El pasado jueves 12 de agosto, Delfina Gómez presentó 10 medidas para el regreso a clases. Entre las mismas se mencionó la carta compromiso o carta de corresponsabilidad. En ese momento y hasta este 17 de agosto, el presidente no dijo nada en contra.
“Se les pide a los padres de familia que nos hagan favor de enviarlos con cubrebocas y con su gel. Y, por otro lado también, que nos lleven la carta compromiso”, dijo Gómez.
Ante la polémica, AMLO dijo este martes que la carta no es obligatoria. Y es que múltiples sectores, agrupaciones de padres de familia y actores políticos afirmaron que el gobierno elaboró esa carta para cumplir el capricho del presidente de volver a clases, sin hacerse responsable de los contagios que surgirán por ese hecho.
Cabe mencionar un fenómeno llamativo: desde este 16 de agosto, en algunos portales de noticias de alcance local y regional en varios estados de la República, se han publicado notas que afirman que la carta responsiva que se hizo viral supuestamente es falsa. Agregan las notas que la SEP llama a los padres de familia a no dejarse engañar, sin embargo, esta información no ha sido confirmada de manera oficial y las declaraciones del presidente confirman que la carta sí se elaboró en los términos que se hicieron conocidos.
*ofv