De acuerdo con Javier Jiménez Espriú, propuesto por Andrés Manuel López Obrador para ocupar la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), la decisión definitiva sobre el Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México (NAIM) habrá de tomarse en la siguiente administración.
En entrevista con el portal Animal Político, descartó que el asunto se vaya a resolver por medio de un votación pública; precisó que la idea es encontrar un mecanismo a través del cual la ciudadanía pueda conocer más a detalle las opciones que el nuevo gobierno ha planteado para el proyecto aeroportuario y expresar su opinión, pero no con un propósito definitorio o vinculante, dadas las limitaciones legales que al respecto existen.
“Quiero ser muy preciso, porque cuando hablé de consulta surgió la noticia de que íbamos a hacer una consulta pública. Yo nunca dije eso. Yo dije: vamos a consultar a la comunidad, como lo haremos en todos los casos de las megaobras: recabaremos la opinión de la ciudadanía, porque creemos que eso es lo correcto y lo procedente”, expuso.
Reiteró que dichas alternativas son proseguir las obras en las condiciones en que están actualmente, modificar su estatus a un esquema de concesión para que sea sólo capital privado el que se invierta y no recursos públicos, o bien, construir el proyecto de las dos pistas en la base militar de Santa Lucía.
Aseguró que la reunión que tuvo la semana pasada con funcionarios de la SCT y representantes del Grupo Aeroportuario Ciudad de México (GACM) se llevó a cabo en un clima de respeto y apertura y se acordó con ellos efectuar una serie de mesas de trabajo, a fin de conocer a fondo toda la información de las obras que ya se realizaron, las que están en curso y las que faltan por licitar, a fin analizar a fondo el proyecto y revisar que los contratos estén apegados a ley.
Jiménez Espriú negó que lo anterior signifique contradicciones con el compromiso de campaña de López Obrador de cancelar el Aeropuerto y afirmó que el propósito de la siguiente administración será garantizar que el proyecto sea viable desde el punto de vista financiero, operativo y de impacto ambiental, pero especialmente, que no haya indicios de corrupción en el otorgamiento de las licitaciones.
Por otra parte, el virtual titular de la SCT aseguró la línea de trabajo al frente de esta dependencia en el gobierno que entrará en funciones a partir del 1 de diciembre, será la plena transparencia en cada una de las obras que se realicen, tanto en las convocatorias de las licitaciones, como en la adjudicación de las mismas, así como una supervisión estricta en cada una de las etapas de su ejecución.
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