Según cálculos del Instituto de Evaluación y Métrica de Salud (IHME, por sus siglas en inglés) de la Universidad de Washington, hacia el 1 de octubre en México habrá unos 88 mil muertos por Covid-19.
Sin embargo, el instituto presenta dos escenarios, uno pesimista y otro optimista. El primero podría ocurrir si se continúan relajando las medidas de distanciamiento social, en cuyo caso las muertes podrían llegar hasta 151 mil, que significarían 63 mil más si no se mantienen las medidas que rigen hasta ahora.
El escenario optimista consiste en mantener el distanciamiento social y la generalización (95 por ciento) del uso de cubrebocas, en cuyo caso las muertes podrían ser de 79 mil 652, unos 9 mil menos que los estimados en caso de mantenerse las medidas actuales.
Según las proyecciones de la universidad norteamericana, el pico de fallecimientos en México será el 20 de agosto, cuando habrá 800 muertos en un solo día.
El IHME indica que hay un par de herramientas indispensables para disminuir las muertes por Covid-19 en México: las pruebas de detección y el uso de cubrebocas. Sin embargo, en nuestro país las autoridades sanitarias, como Hugo López-Gatell, se han resistido a implementarlas de manera decidida.
La institución universitaria también mostró su proyección por entidades de la República; las que registrarían más decesos son el Estado de México, la Ciudad de México, Puebla, Guanajuato y Nuevo León.
El pasado 8 de junio, el IHME presentó su estimación de fallecimientos en México por Covid-19, que calculó serían de 52 mil hasta el 4 de agosto.
El subsecretario de Salud López-Gatell estimó en un principio que en México habría entre 6 mil y 8 mil muertos por Covid-19; a principios de junio dijo que serían 35 mil, y añadió que, en un pronóstico catastrófico, llegarían a 60 mil.
Mientras tanto, hasta el miércoles 24 de junio se han registrado 24 mil 324 muertes por Covid-19.