El vicecoordinador del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en la Cámara de Diputados, Jesús Zambrano, denunció que a cambio de impunidad existe un acuerdo entre el gobierno priista de Enrique Peña Nieto y el movimiento de Andrés Manuel López Obrador para debilitar Ricardo Anaya de cara a las elecciones del 1 de julio.
Este lunes dijo que “con sus torpes ataques contra el candidato presidencial de la coalición Por México al Frente, el gobierno de Enrique Peña está ayudando a Andrés Manuel López Obrador a sucederlo en el gobierno” y afirmó que todo hace pensar que el Presidente se definió pero no por su candidato, José Antonio Meade, quien, a pesar de recursos y la cargada del propio gobierno a su favor, no levanta.
“Sostengo que lo que estamos viviendo es una película en la que se está revelando ya que tienen un acuerdo desde el PRI, desde el Gobierno nacional, para favorecer a López Obrador (…) se están centrando en Anaya, en una suerte de nueva edición de desafuero del año 2006, nada más que ahora contra Anaya”, declaró ya este martes en entrevista en la Cámara baja, de acuerdo con información de Reforma.
El perredista advirtió que los ataques contra el candidato del Frente solo fortalecen a López Obrador y cuestionó que el dirigente de Morena no se haya lanzado a condenar las denuncias por desvíos millonarios de recursos en las gestiones de Rosario Robles. “Dicen por ahí que ya están también teniendo contactos con estos sectores del PRI para entrar en un esquema de perdón anticipado”, añadió.
Sobre las acusaciones de lavado de dinero contra Anaya, Zambrano también preguntó por qué si la PGR, el SAT o el Gobierno Federal tienen pruebas, no lo han detenido. “¿Por qué no lo agarran de una vez y le giran una orden de aprehensión para que puedan proceder conforme las leyes dictan? Todo lo demás es guerra sucia y eso es en lo que estamos situados en el momento actual”, sostuvo.
A través de sus redes sociales, el dirigente perredista también comentó que si hubiera un Fiscal Anticorrupción (que no han querido apoyar en su designación el PRI y Morena) habría menos dudas y más certezas sobre las acusaciones que desde el gobierno federal –a través de la PGR- se han hecho contra Ricardo Anaya.