Como todos los años, llegan las Inmaculadas de Oro para premiar lo más absurdo de la vida política del país.
Este año, la película El hombre que vendió su piel se coló como favorita desde su estreno hace apenas unos días. La cinta trata de un ministro que busca mantener la independencia del Poder Judicial y, para hacerlo, acepta tatuarse el logotipo de la 4T en su corazón. Sin embargo, poco a poco entiende que su decisión implica todo lo contrario a lo que él deseaba: la libertad. Arrebatadora actuación del ministro Arturo Zaldívar. Arrancará varias lágrimas de desesperación.
Pisándole los talones se encuentra como favorita la película Juan Camaney en Acapulco, que narra las peripecias de Félix Salgado Macedonio, quien se percata de que está perdiendo su sex appeal con las mujeres y las autoridades electorales, por lo que acude a todo tipo de artimañas para recuperar su candidatura a la gubernatura. El final mantiene al espectador en la orilla de su asiento.
En la categoría de mejor película de animación está nominada la cinta La Oveja Vargas. La película: Tribuguedón. Esta cinta se encuentra estelarizada por José Luis Vargas, presidente del Tribunal Electoral. Cuenta las divertidas aventuras de la Ovejita Vargas, quien busca, a toda costa, granjearse la estima del lobo, el cual lo tiene amenazado con llevarlo a la cárcel para que pague todas sus tropelías. Una cinta para morirse de risa o de pena.
En las categorías de mejor Banda Sonora está nominado el diputado morenista Saúl Huerta, quien, gracias a una grabación, se supo que no sólo estaba acusado de abuso sexual contra un menor, sino que incluso había buscado sobornar a su madre. También busca la presea el candidato de Redes Sociales Progresistas, Alfredo Adame, quien fue descubierto cuando hablaba de lo lucrativo que podría resultar su campaña al clavarse “25 millones”. El también actor dijo que se referían a cubrebocas, por lo que inmediatamente entró a competir en la categoría de Mejor Cortometraje de Ficción.
En la categoría Mejor Montaje no hubo quien pudiera competirle al presidente Andrés Manuel López Obrador, no por una, sino por las películas Air Force One, historia que narra la rifa de un avión sin avión, y El vuelo, que describe la inauguración de un aeropuerto llamado Felipe Ángeles sin que haya operaciones comerciales. Como siempre, el tabasqueño no decepciona con sus actuaciones.
Por unanimidad, la categoría de Mejor maquillaje se la lleva el fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, por el sublime trabajo que ha realizado con el caso Lozoya.
Este año, además, se hizo un homenaje a Cantinflas. Los encargados de recordar sus más memorables papeles y frases fueron el presidente de la SCJN, Arturo Zaldívar, con su “¡Ahí está el detalle! Que no es ni lo uno ni lo otro, sino todo lo contrario”, o lo que es lo mismo: “Ejerceré el cargo de presidente de la SCJN y del CJF por el periodo para el cual fui electo por mis pares y estaré a la determinación de la SCJN respecto del precepto en cuestión”.
Y por supuesto, el diputado de morena, Ignacio Mier, quien recordó la frase del actor mexicano: “Democracia, mire usted, según la lengua española traducida al castellano, quiere decir demo, como quien dice dimo y dimo con qué nos quedamos” al subir a tribuna y señalar: “Entre derecho y justicia un transformador, un liberador, un revolucionario, opta por la justicia, claro, la supremacía entre derecho y justicia depende de un pensamiento político ideológico”.
Como todos los años en las Inmaculadas de Oro, no hay perdedores, todos los nominados se llevan un trofeo a su casa por representar la tragedia, el drama y la comedia de las y los políticos nacionales.
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