Luego de dos multitudinarias manifestaciones ciudadanas pidiendo su renuncia, el gobernador de Sinaloa Rubén Rocha Moya dijo que no dejará el cargo porque “no hay razones para hacerlo” y que quienes gritaron en su contra solo fueron unos pocos, además de que quienes quieren su renuncia son los que han visto afectados sus intereses.
“El pueblo pone y el pueblo quita, el día que el pueblo dice ‘te puse’, pero luego hay mecanismos para decir ‘te quito’, pero es el pueblo, no es alguien que grita”, dijo con cinismo.
A pocas horas de que la presidenta Claudia Sheinbaum lo defendiera, Rocha se mostró ufano y confiado de seguir en el cargo. Son muy pocos los que quieren que me vaya, argumentó.
“Si yo viera que hay una manifestación que no caben aquí, que están por las orillas y a un solo grito, sería insensible si no tomo medidas al respecto, pero si tú ves que hay una expresión de seis mil, no sé cuántos, me han dicho que cinco mil, yo le pongo seis mil, y dentro de esos, no todos gritaban”, dijo en conferencia de prensa.
De manera cínica, agregó que cualquiera puede “pegar de gritos en su casa y decir fuera Rocha, pero es una manifestación individual”. En Sinaloa hay casi tres millones de ciudadanos, por lo que una manifestación de seis mil no tiene peso, señaló.
“No tengo pensado renunciar, no hay razones para eso. ¿Cuántos pidieron en esa marcha ciudadana el ‘fuera Rocha’?, ponle que todos, se tiene que valorar, esta sociedad está compuesta por más de 3 millones de personas, para una muestra estadística se requiere mucho más que eso”.
Siguió: “¿Cuál es el origen del grito?, pues porque no quieren que esté yo. No han dicho otra cosa. ¿Soy responsable del tema de la inseguridad? No. Hay muchos gobernadores que les tocó esos enfrentamientos”.
Además, yo no soy el enemigo, el enemigo es la delincuencia, agregó. Así, no tengo porque renunciar al cargo, dijo. En todo caso, para eso está la revocación de mandato.
“No existe ninguna razón para que digan que estoy en esa tesitura, soy un gobernador que está cumpliendo con sus funciones y sus tareas y que vive en una sociedad democrática donde todo el mundo se manifiesta y dice lo que piensa”.
Señaló directamente a parientes del exalcalde de Culiacán Jesús Estrada Ferreiro de estar detrás de las tres marchas en su contra, ya que les quitó la chamba. Ellos no tienen autoridad moral para pedir que me vaya.
“Esos no pueden ser la autoridad moral para pedir que se vaya el gobernador, yo te aseguro que muchos de ellos tienen que ver con esos callos que se han pisado a propósito de la lucha contra la corrupción”, dijo a un periodista presente en su conferencia.
También negó ser responsable de la inseguridad que azota Sinaloa. Los responsables son los grupos delincuenciales y “el gobierno está para combatirlos”.
ofv