En abierta contradicción con lo dicho por el presidente López Obrador, el gobernador de Sinaloa Rubén Rocha Moya negó que la violencia que vive el estado se restrinja sólo a la ciudad de Culiacán. “No sabemos” hasta dónde llega, admitió.
En entrevista con el diario Reforma, Rocha Moya dijo que también hay focos de violencia en las rancherías y poblados, además de en la zona urbana de Culiacán y sus zonas residenciales aledañas.
“La delimitación no la puedo hacer yo, porque finalmente no sabemos”, aceptó, a pocas horas de que AMLO dijera con toda seguridad que los “pocos” enfrentamientos se limitaban a la capital, que no se debía exagerar y que los medios exageran.
Los hechos de violencia se están dando en “el área rural de Culiacán, toda esta parte y la propia ciudad, pero es en general, en los municipios que les he dicho (Culiacán, Elota, San Ignacio, Cosalá), ahí donde hay algún evento”, publica Reforma.
Esta zona incluye los poblados de El Salado, Oso Viejo, Higueras de Abuya, Portaceli, Quilá, Baila, Emiliano Zapata, Tacuichamona, Costa Rica Pueblos Unidos, entre otros.
Cuando Rocha Moya hizo estas declaraciones, la Fiscalía estatal ya informaba de 15 homicidios. Por la mañana se hablaba de doce, cifra que AMLO descartó por ser una exageración del Reforma, dijo.
Rocha Moya dijo que lo que ocurre “deriva de los hechos del 25 de julio y que ahí están implicados dos grupos”, los afines a los “Chapitos” y los afines a Ismael Zambada García.
La violencia en Sinaloa se desató desde el pasado 9 de septiembre. Según cifras oficiales del gobierno de Sinaloa de entonces a la fecha ha habido 13 enfrentamientos, 15 homicidios, 20 secuestros y 32 robos de vehículos, además de bloqueos de caminos, vehículos incendiados, retenes, cortes de luz y amenazas a pobladores.
A pesar de eso el presidente dijo que no hay que ser alarmistas.
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