Las empresas Avacor, Bercale Services y Alimentos Frutiva, del empresario Carlos Prats García, muy cercano al senador Adán Augusto López Hernández, han estado bajo intensa revisión del Sistema de Administración Tributaria, al grado que se les han fincado adeudos y multas por muchos millones de pesos.
Una investigación publicada este miércoles por el portal Emeequis da cuenta de las irregularidades que el SAT ha encontrado en las empresas mencionadas arriba y otras más, propiedad de Prats García y su esposa. Prats García es hijo de Carlos Prats Pérez, aliado político de Adán Augusto López Hernández.
Prats y Adán Augusto trabajaron juntos en el gobierno de Manuel Gurría, quien fue gobernador de Tabasco.
Entre las irregularidades y acciones dignas de investigarse localizadas por el SAT, según informa el medio –que tuvo acceso a documentos hacendarios— se encuentran transferencias bancarias “por fuera” de la contabilidad empresarial; tratos con empresas fachada; ocultamiento de ingresos; negocios con proveedores de gobierno; operaciones probablemente simuladas; simulación de competencia; falseamiento de información en licitaciones y falsificación de productos (al hacerlos pasar como hechos en México cuando eran hechos en China).
Señala el reportaje que el SAT inició la revisión de estas empresas hace dos años, en mayo de 2023.
Esas investigaciones han incluido los contratos que han recibido de la Secretaría de la Defensa Nacional, la Guardia Nacional y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, que suman cientos de millones de pesos.
Tras las averiguaciones, se impuso a Avacor un crédito fiscal de 27 millones de pesos correspondiente al 2020. Ese año, dicha empresa obtuvo de la Sedena contratos por 136 millones de pesos.
Respecto a las empresas de Carlos Prats, Emeequis informó en agosto del año pasado que mediante Bercale Services, el empresario y sus socios obtuvieron de la Sedena contratos por 837.5 millones de pesos por la venta “de todo”.
“Vende de todo: edredones y sábanas para hotel, montacargas, equipos para mantenimiento, utensilios de cocina, literas, máquinas hieleras, masking tape, cuadros y tapetes para decoración, torres de iluminación, tinta para impresión… Y todo, se lo vende al ejército…”, señala la nota de Esteban David Rodríguez.
Agrega que Bercale es uno de “los proveedores consentidos de la Sedena”, que “sólo durante el ejercicio de 2023 y en lo que va de 2024 le facturó 670 millones de pesos”, más de 700 millones desde 2019, y, ya con impuestos, 837.5 millones.
Bercale “fue constituida el 26 de mayo de 2011 por los empresarios tabasqueños Carlos Prats García y Leonardo Fernández Compañ, quienes son hijos respectivamente de políticos cercanos a López Hernández: Carlos Prats Pérez y Tomás Fernández Torrano”. Tienen otro socio, llamado Humberto Ramón Muñiz Berman.
“La empresa no tiene más límite para engordar su catálogo de productos que vender a los militares que la imaginación. De hecho, muchas de las obras para las que proveyó materiales son obras “fantasma”. Es decir, son hipotéticas, no se han concretado o están en proyecto, como un conjunto de hoteles que la milicia presuntamente ha de construir en la ruta del Tren Maya, para los cuales Bercale Services vendió ya hasta los cuadros decorativos para las habitaciones”, indica el reportaje de 2024.
Más adelante en el mismo año, otra nota informó de más contratos. En total, Bercale acumuló mil 100 mdp hasta 2024, en tanto que Avacor facturó 260 mdp.
Este 2025 el portal detalla la relación entre Bercale Services y otras empresas como Avacor y Alimentos Frutiva. Se mencionan también a Procesadora Frutiva, Idetep y Grupo Servicorvel. En la red se encuentra implicada la esposa de Prats García: Anna Viesca Sánchez.
Todas estas empresas han logrado contratos gubernamentales, tanto federales como estatales.
Las irregularidades de la red empresarial de estos empresarios, muy cercanos a Adán Augusto, han sido sujetos de la atención de la autoridad hacendaria, pues en numerosas ocasiones se han levantado sospechas sobre lo que denomina “materialidad de las operaciones”, es decir que sean reales y no simuladas, así como la legalidad de su contabilidad.
“Aunque avecindados en Querétaro, los dueños de Avacor, Alimentos Frutiva, Procesador Frutiva, e IDETEP, Anna Viesca Sánchez y su esposo Carlos Prats García, están ligados a una familia de abolengo en Tabasco; el segundo es hijo de Carlos Prats Pérez, exsecretario de Educación de Tabasco y compañero de gabinete de Adán Augusto López Hernández en la gubernatura de Manuel Gurría Ordóñez”, dice la nota.