El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se dijo respetuoso de las opiniones del exembajador de Estados Unidos, Christopher Landau, a la estrategia de su gobierno contra el narcotráfico, sin embargo, subrayó que ambos tienen concepciones de cómo enfrentar esta problemática.
Según el mandatario, es posible que en Estados Unidos piensen que la solución es “arrasar y masacrar”, pero en caso del gobierno que él encabeza al cual calificó como humanista, se tiene la convicción de que la mejor forma de resolver la violencia es con la paz.
“Son concepciones distintas. A lo mejor en Estados Unidos piensan de otra manera, el exembajador Landau…. que hay que arrasar, que hay que aplicar exterminio, masacrar; nosotros no. Tenemos una concepción distinta. Nuestro gobierno es humanista y queremos conseguir la paz con justicia. La paz es fruto de la justicia”, señaló.
El presidente dijo que no estaba enterado de las declaraciones de Landau porque durante su encargo diplomático siempre fue respetuoso de la soberanía de México y su gobierno, como también lo fue el expresidente Donald Trump.
“Respetamos muchísimo al exembajador Landau, se portó muy bien con nosotros. Ahora es la primera vez, y no lo sabía, que me estoy enterando de una declaración de este tipo, porque fue muy respetuoso, porque los anteriores se metían hasta la cocina”, manifestó.
Recordó que cuando sucedió lo del operativo fallido para capturar a Ovidio Guzmán, él dio la instrucción de suspenderlo para evitar que hubiera derramamiento de sangre; entonces, Estados Unidos respetó la decisión de su gobierno de no aceptar su ayuda con agentes para enfrentar al narcotráfico.
“No sólo el exembajador Landau, aquí lo he dicho, el mismo expresidente Trump, cuando lo de Sinaloa, cuando los asesinatos de mujeres y de niños en Bavispe, en las llamadas telefónicas que me hizo en los dos casos, el ofrecimiento iba orientado a que querían ayudar enviando grupos para enfrentar al narco en México. Y yo les agradecí el apoyo y amablemente les dije que era un asunto nuestro que nosotros teníamos que enfrentar. Y quiero también reconocer que el presidente Trump siempre fue respetuoso”, expuso.
López Obrador insistió en que, por más críticas que reciba, siempre sostendrá que la mejor forma de enfrentar a la delincuencia es atendiendo las causas, es decir, dando oportunidades de empleo y estudio a los jóvenes. Asimismo recalcó que al menos en México, ya ha quedado claro que las medidas coercitivas no funcionan, sino que incluso agravan el problema. También se necesita acabar con la corrupción.
“Nosotros pensamos que, si se atienden los problemas sociales, si los jóvenes tienen oportunidad de trabajo, de estudio, podemos enfrentar el problema del narcotráfico, de la violencia y además sostenemos que para enfrentar a las bandas de narcotraficantes se requiere que no haya corrupción, que no suceda lo que pasaba antes, que el secretario de Seguridad Pública estaba al servicio de las bandas de narcotraficantes. Nosotros hemos cuidado que haya una línea divisoria, que haya frontera, delincuencia y autoridad, y antes no había eso”, sostuvo.
A decir del presidente, Landau no es un hombre de mala fe o perverso, sino que simplemente tiene un punto de vista diferente de cómo hacer frente a un mismo problema. Reiteró que su gobierno no entrará en confrontaciones con Estados Unidos y mantendrá una relación basada en el respeto mutuo.
No obstante, calificó como una exageración la afirmación de Landau de que el narcotráfico controla al menos el 40% del territorio nacional; alegó que él puede transitar libremente por todo el país sin guardaespaldas; desde su punto de vista, los partidarios del antiguo régimen han estigmatizado a ciertas regiones del país. Insistió en su teoría de que la mayoría de los pobladores de esas comunidades son “gente buena”.
“Es una exageración….No puedo hablar de porcentajes porque el presidente de México llega a todos los pueblos de México y sin guardaespaldas. Yo transito libremente por mi país, puedo ir a cualquier pueblo, y no los menciono porque no quiero contribuir a estigmatizar a ningún pueblo, porque esos pueblos que están señalados, estigmatizados, ahí en esos pueblos la mayoría de la gente es gente trabajadora, gente buena”, aseveró.
Durante una reunión con exembajadores, Christopher Landau, señaló que el presidente Andrés Manuel López Obrador adoptó frente a los cárteles del narcotráfico una actitud pasiva, lo que representa un gran problema para México y para el gobierno estadounidense.
Consideró que actúa de esa forma para no distraerse de su agenda social. A su juicio la guerra contra los cárteles de la droga es “su Vietnam”, como lo fue para sus antecesores. Alertó que las organizaciones criminales controlan entre el 35% y el 40% del territorio nacional.
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