Después de duros intercambios y muchas protestas de la oposición en la Comisión de Salud del Senado de la República, el presidente de ese órgano, Miguel Navarro, determinó suspender la comparecencia de Hugo López-Gatell, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud.
La intervención más dura fue la de la senadora panista Lilly Téllez, quien increpó a López-Gatell de la siguiente forma: “Usted no es bienvenido. Usted quería quedar bien con el presidente de la República. No se lleve la mano al corazón”, y continuó: “Usted y su trabajo de baratija se han pagado con la muerte de seres humanos. ¿Por qué México tiene la letalidad más alta de todos? No es por complot, no es por comer gansitos, no es por la Conquista”.
“Su cara de sorpresa y las carcajadas de Malú Micher se sientan sobre más de ochenta mil muertes. Levante más las cejas a ver si así lo entiende”, dijo Téllez.
La legisladora señaló: “Usted decidió no hacer pruebas, se obsesionó con una curva que nunca bajó y, como broche de oro, el 73 por ciento de los intubados se mueren”.
La senadora enfatizó en el problema de la falta de pruebas, las cuales salían caras y por ello López-Gatell prefirió ir por lo barato, el modelo centinela, por lo que, dijo, “usted es la encarnación de ese dicho popular: ‘Lo barato sale caro’”.
También lo cuestionó sobre la alta tasa de letalidad que se registra en México, de 10.3 por ciento, muy por encima del 3 por ciento de países que han tenido alto número de muertes por Covid-19.
Además, Téllez entregó a López-Gatell un bastón y le dijo: “Con todo respeto para las personas ciegas, empezando por mi propio padre, le voy a entregar su cetro, pequeño virrey del país de las camas vacías y de los muertos en casa. Con su lealtad al presidente usted sólo ha dado pasos de ciego”.
Posteriormente, Navarro declaró: “Al no ver las garantías de civilidad, le pido por favor me permita suspender la reunión ya que no hay el comportamiento debido de una comparecencia. Muchas gracias a ustedes”.
Sin embargo, antes López-Gatell había evadido diversos cuestionamientos y había hecho una serie de declaraciones políticas: por ejemplo, habló de la “negligencia de la minoría” que quería dar ahora lecciones de honestidad aunque hayan gobernado por los últimos 30 años (aunque él haya trabajado en varios de ellos).
El funcionario de salud remitió a los senadores a revisar información previa: “No perdemos la esperanza de que vean los documentos, de que vean la evidencia, de que vean las conferencias vespertinas, para eso fueron hechas; 220 conferencias que hemos tenido se pueden ver. Pueden hacerlo en pausas para que no sea tan tedioso”.
Cuando varios miembros del Senado abandonaron su comparecencia debido a su falta de respuestas, López-Gatell añadió: “Les invitamos nuevamente, con todo respeto, a que se integren, que esta disonancia cognoscitiva no les haga mantenerse en el reducto de la minoría, de la autorrepresentación de su papel minoritario en la conciencia pública. Les invitamos a ser parte de la solución.
“Lamento que se sustraigan una y otra vez de la realidad; veo curules vacías nuevamente, como lo estuvo en la comparecencia de mi maestro Alcocer. Pero no perderemos la esperanza; veo que la senadora Márquez se apresta a retirarse, ¿se llevará las lonas? No lo sé, pero bueno, regresemos al diálogo con el país”.
También varias senadoras llevaron cartulinas grandes que imitaban el octágono del etiquetado de productos (que promovió López-Gatell) con leyendas como “Exceso de ineptitud” y “Exceso de soberbia”, y lonas con caricaturas como una en la que se ve al funcionario mientras echa una manta sobre calaveras y otra en la que va con el cubrebocas sobre los ojos mientras transita en un camino rodeado de cruces.
Buen parte de ello fue porque López-Gatell rehuyó a dar respuesta a los señalamientos de las legisladoras y les decía: “Tomen nota de lo que se ha hecho”. E insistió en un discurso que ha dicho varias veces: que el actual gobierno tomó un sistema de salud con 400 hospitales abandonados.
Y agregó: “Hemos tenido 11 semanas con una disminución de transmisión del acontecer epidemiológico”.
La senadora Verónica Delgadillo, de Movimiento Ciudadano, le señaló a López-Gatell que el manejo de la pandemia ha sido un desastre, “lleno de omisiones, de negligencias y de errores. Ojalá eso se quedara ahí, pero no: estamos hablando de vidas, de miles de personas que perdieron todo lo que tenían, incluyendo a un ser querido”.
Nuvia Mayorga, del PRI, acusó al funcionario de haber incurrido en “numerosas contradicciones y desatinos” en la atención de la epidemia de Covid-19.