Diversos medios de comunicación han mostrado un video grabado en mayo en el que se observa a miembros del Ejército que detienen a civiles armados y después los asesinan, tras lo cual modifican la escena del crimen antes del arribo de las autoridades investigadoras.
Este martes comenzó a circular un video de una cámara de seguridad grabado el 18 de mayo en Nuevo Laredo, Tamaulipas, en el que en un primer momento se observa a una camioneta negra en descontrol que incluso atraviesa una parte de una avenida en sentido contrario, y a alta velocidad se estrella con un muro que en su parte superior tiene una alambrada. Según el reloj de la cámara, eran las 2:36 de la tarde.
Menos de un minuto después se observa el arribo de un vehículo artillado del Ejército mexicano que impacta contra el lado derecho de la camioneta negra; algunos soldados descienden del transporte militar y otros llegan a pie, y al menos un número de 12 elementos rodean la camioneta, la que abren y de la que hacen bajar a cinco civiles, quienes no oponen resistencia. También se ve que sacan un arma de alto poder.
Al bajarlos de la camioneta, los patean y los colocan contra la pared, fase en la que ya no se observa el vehículo militar. El video sigue, y se ve que los militares se cubren con la camioneta negra y disparan. Entonces también tiran contra los civiles alineados contra la pared, uno de los cuales intentaba huir rodando. Los asesinaron.
Finalmente, se observa que un soldado les acerca (“siembra”) armas a los cuerpos de los civiles, y otro que quita las esposas a un cadáver. El personal de la Fiscalía arribó más de tres horas y media después.
Sobre este caso, los militares declararon ante la Fiscalía General de la República que las cinco personas asesinadas habían quedado entre un fuego cruzado.
En la nota de Pablo Ferri para El País se refiere que el teniente de infantería a cargo del convoy militar declaró que, mientras desarmaban a las personas de la camioneta, otras personas que pretendían rescatarlas atacaron a los soldados, los cuales repelieron la agresión. Al terminar esa refriega, los militares se dieron cuenta de que ya cuatro de los detenidos estaban muertos y uno más en estado crítico a causa del fuego cruzado.
Ese 18 de mayo hubo bloqueos de vialidades y enfrentamientos entre el Ejército y civiles armados (hubo reportes de que pertenecían al Cártel del Noreste) en Nuevo Laredo; entonces las autoridades municipales declararon que por conflictos en varias partes de la ciudad se encontraban en situación de riesgo, por lo que le pidieron a los pobladores no salir de sus casas o de sus centros de trabajo. Horas después, las fuerzas federales declararon la situación bajo control.
Apenas el 1 de junio el presidente Andrés Manuel López Obrador, en su conferencia de prensa, realizada en Tampico, Tamaulipas, dijo que ahora “no se autorizan masacres, como era antes, desde el Estado. Si vemos el índice de letalidad, vamos a ver con mucha claridad la diferencia: antes eran más en los enfrentamientos los muertos que los heridos y detenidos”.
López Obrador comparó su gobierno con el de Felipe Calderón: “Mira los fallecidos en enfrentamientos, heridos y detenidos. Este índice de letalidad es muy claro: eran más los asesinados en enfrentamientos con las Fuerzas Armadas que los heridos y detenidos, porque la consigna era rematar a heridos, barrer, y esto se mantuvo”.
Continuó: “Mira la diferencia con nosotros: son más heridos, detenidos que los que pierden la vida. Esto es un indicador de que respetamos derechos humanos en la práctica. Por eso no acepto lo que sostienen algunas organizaciones de la sociedad civil, de la llamada sociedad civil, o también de las supuestas organizaciones no gubernamentales y también de organizaciones defensoras de derechos humanos, porque nos quieren meter en el mismo saco, en el mismo costal, y no somos iguales”.
Allí está un video que muestra lo contrario.
Elementos del Ejército masacran a civiles en Nuevo León.
Vía: @elpaismexico pic.twitter.com/ATUQlEFWbP
— etcétera (@revistaetcetera) June 7, 2023
