De regreso de su viaje por España y el Vaticano, Xóchitl Gálvez, aspirante presidencial de Fuerza y Corazón por México, tundió a Álvaro Delgado, director de Investigación de SinEmbargo, a quien, con varios puntos, rebatió por su acusación de “vendepatrias”.
En su Conferencia de la Verdad de este jueves, la hidalguense respondió contundentemente a las acusación que, de manera no tan velada, le hizo Delgado, un destacado propagandista del oficialismo, de “vendepatrias” por sus visitas a Estados Unidos y Europa.
Cuando le dieron la palabra a Delgado Xóchitl le dio la bienvenida, y él, en un tono provocador, le comentó que estaba “bien bendecida, me dicen”, y, en lugar de cuestionar, acusó sobre el viaje internacional de Gálvez: “Se les llama ‘vendepatrias’ a todos aquellos mexicanos que van al extranjero a solicitar a gobiernos y a organismos extranjeros que intervengan en asuntos que sólo les competen a los mexicanos”.
Y, en el estilo del más rancio chovinismo priista, Delgado continuó con una comparación histórica fuera de lugar producto de su ignorancia: “No es de ahora: es del siglo pasado, antepasado, particularmente cuando fueron los conservadores a traer a Maximiliano; no es una dedicatoria para usted (risas de Xóchitl). Yo le pregunto a usted si le parece patriótico ir al Departamento de Estado de Estados Unidos, ir a la OEA a que interfieran en asuntos de los mexicanos”.
Gálvez le respondió que le daba mucha risa la comparación con Maximiliano de Habsburgo, reivindicó que ella se relaciona con gobiernos democráticos y, para contrastarse, mencionó ejemplos del gobierno actual: “A mí no me vas a ver invitar al Ejército venezolano a México, ni al Ejército ruso después de haber invadido Ucrania (porque la invadió); ni al dictador cubano que violenta los derechos humanos”.
La opositora le aclaró a Delgado que su visita a Estados Unidos obedeció a una realidad: las exportaciones a ese país, el principal socio comercial de México. “Esa es la realidad, Álvaro: dependemos económicamente de nuestras exportaciones; los empleos de México dependen de que le vaya bien a Estados Unidos y nos compre mercancías”.
“¿Tú te imaginabas, cuando esos que hablaban de ‘vendepatrias’ en 1994, que el Tratado de Libre Comercio nos iba a llevar a que el 99 por ciento de los televisores que se consumen en Estados Unidos sean fabricados en México? La verdad es que nadie se lo imaginaba, y había mucha gente de la izquierda que no quería el Tratado de Libre Comercio porque decían que era apoyar el neoliberalismo. Yo por eso le hice una broma a Morena cuando, en conjunto, ratificó el T-MEC, y les dije: ‘Welcome to neoliberalismo’. No hay nada más neoliberal que un tratado de libre comercio, pero eso es bueno para México, eso le ayuda a México, eso beneficia a la relación comercial entre México y Estados Unidos”.
Xochitl añadió que en la Unión Americana pudo tener diálogos inteligentes, con think tanks, sobre temas económicos como inversiones y las preocupaciones que allá hay al respecto, como la inseguridad, la energía, la infraestructura, la falta de capital humano, “y obviamente les preocupa el Estado de derecho, les preocupa que la ley no sea la ley, porque ellos manejan fondos de pensionados”.
Acerca de su visita a la Organización de los Estados Americanos, le recordó a Delgado que la observación electoral “se ha hecho toda la vida”, y mencionó que el miércoles había estado con Guadalupe Taddei, consejera presidenta del Instituto Nacional Electoral, quien se comprometió a que continuará.
“Eso no es ser ‘vendepatrias’, eso no significa que le preocupa a Morena que vengan a observar el proceso electoral si todo está en regla, si los Servidores de la Nación andan comprando votos todos los días, y eso lo sabes: que todos los días van a las casas a pedirle a la gente que apoyen a su partido o les quitan los programas sociales. Eso lo hacía el partido de antes, eso que se quejaron lo aprendieron muy bien”, dijo Gálvez a Delgado, y remató: “Yo lo que quiero es que haya una elección limpia, democrática, derecha; pero yo eso de ‘vendepatrias’ no”.
Acerca de la actual relación con Estados Unidos, Gálvez clavó otra banderilla: “¿Sabes quién sí hizo algo indebido? El presidente sí aceptó ser tercer país seguro sin nada a cambio, sin ningún tipo de negociación, sin plantear la posibilidad de que los mexicanos que están allá tengan la residencia. No peleó por ello, no peleó por 11 millones de mexicanos que viven en Estados Unidos de manera indocumentada; no peleó recursos para los migrantes que están de paso por México, de los cuales 40 murieron en la estación migratoria. ¿Qué es ser más ‘vendepatrias’? ¿Aceptar ser tercer país seguro sin nada a cambio?”.
En sentido contrario al gobierno que defiende Delgado, Gálvez expresó que no aceptaría que México sea tercer país seguro a cambio de nada: “Tiene que haber recursos para que estos migrantes tengan una vida digna, que se respeten sus derechos humanos. Y de eso hablé con el papa: de que los países se tienen que abrir a la migración, que tienen que ver a los migrantes como una oportunidad y tratarlos de una manera digna. Nosotros no hemos tratado bien a los migrantes, Álvaro”.
“Pero esas historias de la izquierda que los ‘vendepatrias’: no hay cosa peor en México para la soberanía nacional que la delincuencia y el crimen organizado que tiene controlado buena parte del territorio”, manifestó la hidalguense.
Delgado insistió sobre las entrevistas con el Departamento de Estado; Gálvez contestó, categórica, al comunicador gobiernista: “Son como las que tiene el presidente; igualitas de patrióticas”.
“Gracias”, balbuceó Delgado.
Xóchitl Gálvez (@XochitlGalvez) tunde a Álvaro Delgado (@alvaro_delgado), matraquero de la 4T. pic.twitter.com/8B9Rt2NETk
— Marco Levario Turcott (@Arouet_V) February 15, 2024