Una de las características del periodismo de ficción es que sus historias casi siempre quedan en suspenso o se diluyen al paso del tiempo sin conclusión alguna (y sin que sus seguidores sepan en qué terminaron). Estas son algunas recientes:
1. Hace poco más de cuatro años, el 31 de enero de 2013, hubo una detonación entre el sótano y el primer piso de una torre de Pemex en la colonia Anzures de la Ciudad de México, por el que murieron 37 personas. La Jornada difundió que la causa del siniestro “podría” ser una bomba e incluso la revista Proceso sugirió que “podría” haber sido un atentado terrorista. Al paso del tiempo fue claro que esto ocurrió por acumulación de gases pero ni el periódico ni el semanario aclararon, reconocieron el error o le dieron seguimiento para demostrar lo que en ese momento sugirieron.
2. Al finalizar 2015 y durante el primer semestre del año pasado, varios medios, entre otros la revista Proceso, difundieron que la salud del Presidente estaba resquebrajada, pero luego el tema se diluyó y ahora no sabemos –siguiendo esa ruta– de qué estuvo enfermo, cómo se salvó o si Peña Nieto no es el verdadero Peña Nieto y fue sustituido por un impostor.
3. También al finalizar 2015 y durante la segunda mitad de 2016, algunos medios y periodistas, entre ellos Carmen Aristegui y Proceso, aludieron a supuestas desaveniencias entre Enrique Peña Nieto y su esposa (tomando como base algunos videos, la mayoría adulterados). Paulatinamente el tema se desvaneció –entre apretones de mano, empujones, gestos y hasta un posible viaje de la señora por Italia– y ahora no sabemos nada más.
4. A principios del año pasado varios portales y periodistas (además de legiones de usuarios de las redes sociales) difundieron que la mala calidad del aire se debía a la gasolina china que nuestro país importaba. Aristegui no lo afirmó, sólo sugirió que podría ser y que en caso de que fuera, sería muy grave. No era cierto, desde luego, pero esa historia, como muchas otras fue dispersándose conforme vendrían otros “´podrías” o “sería”. (Los medios que difundieron esa especie mentirosa hicieron lo mismo que las legiones de usuarios, o sea, quedaron tan indiferentes como la muralla china)
5. En septiembre de 2015, el portal de Aristegui Noticias tenía o parecía tener una investigación explosiva: sugirió que las autoridades sanitarias mantenían en secreto el implacable avance del Chinkungunya en todo México. Casi año y medio después ignoramos si ya están en todo el territorio nacional o cómo fue que se detuvo el avance si es que se detuvo.
6. Ustedes recuerdan el Huracán Patricia, considerado como uno de los de mayor riesgo en la historia de acuerdo con distintas dependencias y organismos internacionales. Bueno pues, entre el 23 y el 30 de octubre de 2015, los señores Álvaro Delgado y Jenaro Villamil dijeron que esto fue resultado de una conspiración del gobierno federal en el que caímos muchos redonditos (menos ellos, expertos en fenómenos naturales y complots internacionales) pero ya no le dieron seguimiento al tema y nos quedamos con las ganas de conocer los detalles de esa fantástica elaboración.
7. ¿En dónde estaba Dolia Estévez que escuchó las amenazas y la humillación de Trump al mandatario mexicano, quién se lo dijo a ella y cómo es que le dio total verosimilitud, así sin una sola prueba, documento o testimonio? Pero lo más importante ¿Cuándo nos invadirán las tropas gringas, es cosa de horas o tengo tiempo de ir al gym entre mañana y pasado? ¿O el gobierno mexicano fue tan poderoso que ya diluyó el fantástico riesgo?