El susto de Lorenzo Córdova porque acabe la democracia mexicana, coincide con el éxito propagandístico de la apertura del nuevo aeropuerto. Sí, porque la consulta que canceló el de Texcoco, marcó el inicio del fin del proceso democrático que hoy parece aterrar el consejero presidente del INE.
Pero Lorenzo Córdova descubre el agua tibia cuatro años y medio después de aquella consulta que hizo Morena ninguneando olímpicamente al INE. Dice él: “Si siguen con las trampas, lo único que van a lograr es alejar a la gente de las urnas, porque la gente está cansada de las trampas”.
¿Trampas? Caray: ¿Más que aquella consulta, ante la que el INE mantuvo un silencio sepulcral? Es loable y hasta de agradecer que, a medida que avanzó el autoritarismo del este gobierno, el consejero presidente del INE se volvió baluarte de la defensa de nuestra democracia. Pero tampoco hay que olvidar.
Recordemos, pues:
La consulta fue realizada por el partido Morena del 25 al 28 de octubre, a poco más de un mes de que tomara posesión su candidato presidencial ganador: excluyendo al INE, y con la participación de apenas el 0.8 por ciento del padrón electoral.
Aquella consulta (que hizo perder la confianza jurídica en México de los inversionistas y las calificadoras del mundo, al menos por este sexenio) la realizó Morena cómo, dónde y entre las personas que le dio la gana a Morena, entre sólo un millón de los 90 millones del padrón del INE.
Morena confeccionó las boletas, las guardó donde quiso y, en vez de tinta indeleble para marcar el dedo de los votantes, utilizó violeta de genciana, un colorante para combatir los hongos de los dedos del pie, que se cae con agua.
De los participantes, 748 mil votaron para que el nuevo aeropuerto se construyera donde indicó el futuro presidente (Santa Lucía) y 311 mil en Texcoco: 69.95 por ciento contra 29.1 por ciento: las casillas las instaló Morena, los votos los contó Morena, los resultados los informó Morena.
El futuro de la mayor obra de infraestructura del primer cuarto de siglo en México fue decidido por el 0.1 por ciento del padrón electoral, en una consulta que hizo el partido que, sin embargo, había ganado la presidencia con el 41 por ciento del padrón electoral: una falta de proporción abismal.
La consulta se hizo en 538 municipios seleccionados por Morena, la mayoría de los cuales estaba distante a miles y miles de kilómetros de Texcoco, y ninguno del Estado de México, donde está Texcoco, y sólo 16 de la cercana CDMX:
—42 de Chiapas.
—Nueve de Campeche.
—Dos de Baja California Sur.
—Cinco de Baja California.
—Dos de Aguascalientes.
¿Trampas, consejero presidente?
Uf, vienen desde entonces.