Para los medios que durante años han apoyado al chavismo en Venezuela, las protestas contra Nicolás Maduro son "manifestaciones de la oposición", maquinaciones del gobierno de Estados Unidos, pulso de fuerza entre "opositores" y partidarios" o intento por “adelantar las elecciones”.
Los ocho muertos y más de 300 heridos, la denuncia de Amnistía Internacional o las amenazas contra el líder opositor Henirque Capriles, al que Maduro llamó “basura”, son notas de interiores o no existen.
El jueves, mientras los portales de The New York Times, El País, la BBC, incluso Le Figaro, inmersos en el atentado en los Campos Elíseos, tuvieron espacio para documentar las protestas contra el régimen de Nicolás Maduro y la represión contra los manifestantes, la solicitud de Amnistía Internacional para que se respeten los derechos humanos y las cifras de víctimas.
“Al igual que en la víspera, vehículos antimotines, tanquetas y gases lacrimógenos también fueron utilizados por las fuerzas del orden de Venezuela para dispersar las marchas”, destacó BBC Mundo.
“La oposición venezolana opta por la movilización permanente en la calle”, mantuvo como nota principal el portal internacional de El País.
La agencia de noticias mundial, AP o Associated Press, destacó que Nicolás Maduro había allanado e incautado la fábrica de General Motors en Valencia, Venezuela, aprovechando las manifestaciones y, la firma estadounidense anunciaba el cierre de operaciones en ese país.
Mientras, el portal de Sin Embargo, Aristegui Noticias, La Jornada y Proceso, no hablaban de las masivas manifestaciones o daban más importancia a las declaraciones de Nicolás Maduro respecto a que Venezuela vivía un complot armado por Washington.
“Maduro acusa a EU de presionar a los opositores venezolanos para impulsar golpe de Estado”, destacó Sin Embargo como continuación a la información de dos días antes, respecto a que: “Maduro pide demandar opositores que acusen a la fuerza pública de “barbaridades”.
Para estos medios nunca existió la noticia de que el llamado "ahijado" de Nicolás Maduro, Efraín Antonio Campo Flores, quien creció como hijo en el hogar de Maduro y su esposa Cilia Flores, fue detenido por narcotráfico junto con otro amigo de la familia presidencial.
“Cuando realizaban un importante transporte de droga dirigido a EU, Efraín Antonio Campo Flores y Francisco Flores de Freites han sido puestos a disposición de la Justicia estadounidense acusados de narcotráfico”, según publicó el rotativo español ABC en noviembre de 2015.
Para la revista Proceso, las noticias importantes fueron los hechos de corrupción en México; las declaraciones del “Cuau”; la declaración de López Obrador respecto que Felipe Calderón habría exonerado a Humberto Moreira; las elecciones en el Estado de México; las acusaciones con Deschamps, el caso Duarte; el seguimiento al caso Yarrington y, solamente, en un pequeño recuadro, una nota sobre Venezuela que había durando menos de una hora como principal, antes de caer a la “cola” de la página de inicio.
La Jornada también tenía hasta la cola de la información que: “Opositores se enfrentaron también ayer en Caracas, durante una megamarcha contra el presidente Nicolás Maduro”.
El portal de Aristegui finalmente se encontró que el gobierno de Maduro ha desatado la violencia, y documenta un video interesante, aunque como nota secundaria y concluye que: “(Las) Protestas de la oposición el miércoles y este jueves, brotes de violencia, la incógnita sobre próximas elecciones… es el panorama actual en el país”.
Ni hablar del órgano oficial de Morena, que solamente ha hablado en los últimos días de que Maduro: “Anunció el llamado ‘Plan Zamora’, que significó a armar a 500 mil civiles y, que “además pidió procesar al presidente de la Asamblea Nacional, Julio Borges, por 'encabezar' un golpe de Estado".