Barcelona, España
Museo Picasso. Foto: Rubén Aguilar Valenzuela
– Historia
El museo nació gracias a la idea y el trabajo de Jaime Sabartés, amigo personal y secretario del Picasso desde 1935 hasta su muerte. Al inicio pensó hacerlo en Málaga, tierra natal del artista, pero lo animó a que fundarlo en Barcelona. En 1960, Sabartés propuso al Ayuntamiento de la ciudad la creación del museo. Ese año se firma el acuerdo que lo constituye.
En 1963 se inaugura bajo el nombre de Colección Sabartés, para evitar problemas por las diferencias políticas entre Picasso y el franquismo. El museo se ubica en el Palacio Aguilar y en la primera época la colección cuenta con las obras en manos de Sabartés, algunas litografías y cuadros del Museo Nacional de Arte de Cataluña (MBAC). También se incluyen dibujos de la colección de Luis Garriga Roig.
El mismo año se incorpora una donación de Salvador Dalí, un libro con grabados que Picasso había hecho para Las metamorfosis de Ovidio, y el collage Cabeza, de 1913, donado por Gala. La colección crece con donaciones, como la de los siete dibujos (1899 y 1904), que en 1966 dona Sebastià Junyer Vidal. En 1968 muere Sabartés y Picasso entrega al museo 58 cuadros sobre Las Meninas de Velázquez y el Retrato azul de Sabartés, de 1901. A partir de entonces se compromete a dar al museo una copia de cada nuevo grabado que realizara.
– Edificio
Museo Picasso. Foto: Rubén Aguilar Valenzuela
El museo ocupa cinco palacios en la calle de Montcada en el caso histórico de Barcelona. Fueron originalmente construidos entre los siglos XIII y XIV y fueron modificaciones, sobre todo en el siglo XVIII. Los edificios son del estilo del gótico catalán. La estructura es la misma: en torno a un patio central se construyen dos pisos. Al segundo se accede por una escalera exterior.
A) Palacio Aguilar (Montcada, 15)
Fue el primero que ocupó el museo. Se construye en el siglo XIII, pero se hacen remodelaciones considerables entre el siglo XV y el XVIII. Por siglos el edificio perteneció a familias de la burguesía catalana y en 1953 lo compra el Ayuntamiento de Barcelona. En los años sesenta se restaura. En los trabajos se encuentran restos de pinturas del siglo XIII, que ahora se exhiben en el MNAC. Del conjunto arquitectónico destaca el patio central del siglo XV, con una escalera descubierta y una galería de arcos góticos.
B) Palacio del Barón de Castellet (Montcada, 17)
Es del siglo XIII y fue remodelado en el siglo XV y el XVIII. Destaca el relieve con temática religiosa de la fachada que es del siglo XVI. En el interior hay un salón neoclásico de mediados del siglo XVIII con mármol y relieves policromados. El Ayuntamiento de Barcelona lo compra en los años cincuenta.
C) Palacio Meca (Montcada, 19)
Es edificado entre el siglo XIII y el XIV. Es reformado en el siglo XVIII. Destacan los artesonados medievales policromados de la planta principal y algunos techos decorados durante el siglo XIX. En 1901 el edificio fue donado a los Hermanos de la Doctrina Cristiana y se instaló el Montepío de Santa Madrona, que luego se integró a un banco que cedió el edificio al Ayuntamiento de Barcelona en 1977. Se incorpora al museo en 1982.
D) Casa Mauri (Montcada, 21)
Es del siglo XVIII, pero está edificada sobre estructuras de la época romana. Destaca la celosía de madera de la fachada, casi el único ejemplar en Barcelona de este sistema de cierre típico del siglo XVIII. En 1999 lo adquiere el museo.
E) Palacio Finestres (Montcada, 23)
Se construye sobre las bases de un edificio del siglo XIII, ocupa el espacio de una antigua necrópolis romana. Destaca unas arcadas en la planta baja, añadidas durante el siglo XV y ampliadas en los siglos XVII-XVIII. En la planta alta hay un techo artesonado del siglo XIII. Y dos ventanales trigeminados con columnas. Se utiliza para exposiciones temporales.
Museo Picasso. Foto: Rubén Aguilar Valenzuela
– Colección
La colección permanente se compone de más de 3,800 obras. Es la más rica en el período de los años de formación de Pablo Ruiz Picasso (1881-1973). De 1890 a 1917 son la mayoría. De 1890 a 1897 hay dibujos de su infancia y de su época de estudiante en Málaga, La Coruña y Barcelona. Está Ciencia y caridad (1897). Obras de entre 1897 y 1901, su época formativa, en Barcelona, Horta de Sant Joan y Madrid. También del periodo azul y de su época barcelonesa como Arlequín (1917). El museo dispone de pocas obras posteriores a 1917, con excepción de la serie Las Meninas, que pinta en 1957. La colección de obra gráfica comprende el período entre 1962 y 1982. Además, se incluyen algunas de las ilustraciones que realiza para algunas ediciones de libros. Está también la colección de cerámica, donada por Jacqueline, viuda del artista.
Museo Picasso. Foto: Rubén Aguilar Valenzuela
– Visita
A) Los inicios: Málaga, 1890 / La Coruña, 1891-1895 (Sala 1)
Picasso desde pequeño entra en contacto con el arte. Su padre era pintor, profesor de bellas artes y conservador del Museo del Patrimonio Municipal. En la sala se pueden ver algunos dibujos de este primer periodo que muestran un trazo y una composición de carácter infantil, pero con un cierto tono académico, intentando imitar a su padre. De la época en La Coruña se pueden ver los dibujos que comenzó a realizar como ejercicios y algunas pequeñas tablas al óleo. De esta época son: Hombre con boina; Retrato de la madre del artista; Retrato del padre del artista; Autorretrato.
B) Formación Barcelona, 1895-1897 (Salas 1, 2 y 3)
En 1895 Picasso deja Málaga, para instalarse en Barcelona. Se inscribe en la Escuela Llotja. En estas salas se ve una serie de dibujos y óleos académicos, donde sobresalen los dibujos al natural y algunos aspectos relacionados con lugares concretos de la ciudad donde ejercitó la pintura al aire libre. También se puede ver el primer óleo que presenta en la III Exposición de Bellas Artes e Industrias Artísticas de Barcelona, Primera Comunión, hecho sólo con quince años, y el Retrato de la tía Pepael más importante de su fase formativa. La obra Ciencia y caridad (1897) está influenciada por el realismo social. Obtiene la atención en los medios artísticos de la época. Es una de las obras maestras de juventud y con ella gana una mención honorífica en la Exposición Universal de Bellas Artes de Madrid. Está también el Autorretrato (1896).
C) Madrid – Horta de Sant Joan, 1897-1899 (Sala 3)
Se ven obras de su tiempo de estudiante en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, en Madrid, de la que el artista reniega públicamente. Cuando regresa a Barcelona, enferma de la escarlatina y se traslada a Horta de Sant Joan, pueblo de su amigo Pallarès. Es cuando realiza pinturas de ambiente rural, donde queda patente su tratamiento de la luz y la espontaneidad de su pintura. De este tiempo es: El mas del Quiquet.
D) Barcelona (1899-1900) (Vanguardismo) (Sala 4)
Se ven las pinturas de la época que Picasso entra en contacto con el vanguardismo catalán y el círculo de Els Quatre Gats. Aquí entabla amistad con Carlos Casagemas, Jaime Sabartés, Joaquim Mir, Isidre Nonell y Ramón Pichot, entre otros. De esta época son: Retrato del escritor Ramón Reventós; Poeta decadente; La calle de la Riera de San Juan, desde la ventana del estudio del artista.
E) París (1900-1901) (Salas 5-7)
Se ven los primeros trabajos de Picasso en París donde llega en el otoño de 1900. Entra en contacto con las vanguardias europeas y se centra en el impresionismo y el puntillismo. Sus obras muestran el París nocturno. De las obras de esta época destacan: El abrazo; El final del número; Barraca de feria; Bodegón; La espera (Margot); Autorretrato (1900). En Naturaleza muerta (1901) ya es él.
F) Época Azul (1901-1904) (Sala 8)
El tono azul es el dominante y de manera progresiva, al final de la etapa, todo es de ese color. Destacadas: La mujer de la cofia: Azoteas de Barcelona; Desamparados; El loco; Cabeza de mujer (Fernande).
G) Época Rosa (1905-1906) (Sala 9)
En este periodo comienza a ampliar de nuevo su paleta de colores. Se centra en el mundo del circo y los saltimbanquis. Pasa una temporada en Gósol, donde comienza a realizar estudios sobre el volumen y manifiesta interés por el arte ibérico. Destacan: Retrato de la señora Canals; Arlequín, Retrato de Benedetta Blans (1905).
Museo Picasso. Foto: Rubén Aguilar Valenzuela
H) Barcelona (1917) (Salas 10 y 11)
Picasso conoce a la bailarina Olga Khokhlova con la que después se casa. De este periodo hay obras que muestran la búsqueda de nuevos recursos plásticos. Destacan: La ofrenda; Caballo corneado; El Paseo de Colón; Blanquita Suárez; Copa y paquete de tabaco. Me impresionaron: Arlequín (1917), Capa y paquete de tabaco (1924).
I) Las Meninas (1957) (Salas 12 y 13)
Aquí están Las Meninas, que Picasso realiza entre agosto y diciembre de 1957, sobre Las Meninas de Velázquez. Es una serie de 58 obras donadas por Picasso al museo en 1968. Estas muestran un profundo estudio del ritmo, el color y el movimiento y también una enorme imaginación por parte del artista.
J) Picasso ceramista (Salas 15 y 16)
Museo Picasso. Foto: Rubén Aguilar Valenzuela
Reúne 41 piezas de cerámica, propiedad de Jacqueline Roque, la segunda mujer de Picasso, que en 1982 las dona a Barcelona. Se realizaron entre 1947 y 1965. Picasso emplea ollas, jarras, platos y fuentes de mesa en las que deja su impronta con dibujos de búhos, toros, peces o rostros de mujeres.
Picasso se interesó por la cerámica a partir de 1947 cuando visita el taller que Suzanne y Georges Ramié tenían en Madoura de Vallauris, Francia. Él no tornea las piezas sino pinta las que produce el taller y a veces interviene, todavía frescas, algunas de ellas, para después pintarlas. Los críticos aseguran que le resultaba muy interesante el reto de trabajar con objetos tridimensionales: un plato, pintado y grabado, podía convertirse en una cabeza; un grupo de mujeres o de bailarinas podía rodear interminablemente el cuerpo de una jarra; el interior cóncavo de un cuenco podía crear una ilusión de volumen en la criatura pintada en ella.
En 1952, Jacqueline Roque y Picasso se conocen de manera circunstancial cuando ella empieza a trabajar en la tienda del taller de cerámica. A partir del primer encuentro, empezaron a verse y forjaron un vínculo que duró casi dos décadas. Vivieron juntos hasta la muerte de Picasso y ella a más de esposa se convirtió en compañera y musa.
Estas obras de cerámica reflejan la preferencia de Picasso por las formas y técnicas de decoración populares, con las que experimenta para transformar objetos de producción industrial en arte. A partir de 1957, luego de visitar una exposición en Cannes sobre los 600 años de cerámica española, el artista empezó a trabajar en grandes platos imitando la cerámica tradicional de la época medieval, lo que queda plasmado en esta muestra. Entre las obras tardías de la exposición, las de 1965, destaca una serie de “empreintes originales” (huellas originales), un método que Picasso creó con la ayuda del hijo de Georges Ramié para producir “impresiones cerámicas”, a partir de un molde de yeso esculpido por el artista.
K) Espacio Sabartés (Salas S)
Dedicado al primer promotor del museo, Jaime Sabartés, secretario personal y amigo íntimo de Picasso. Una de las obras más destacadas de este espacio es el retrato que Picasso le hizo con gorguera, pintado en Royan en 1939.
L) Grabados (Salas G)
Picasso realiza más de 2,000 grabados, el museo guarda 1,500. Por razones de conservación y espacio no todas están expuestas. Buena parte son donación de Jaime Sabartés y a partir de 1968 del artista. Obras destacadas: La Minotauromaquia; Suite Vollard; Las metamorfosis de Ovidio y la Ilustraciones de la Celestina. Hay una serie de 33 litografías de Jaqueline.
– Comentario
Es la tercera vez que visito el museo a lo largo de estos últimos 38 años. La primera vez en 1975, la segunda en 1998 y ahora ésta de 2013. Es muy bueno el conjunto de las cinco casas o palacios que van del siglo XIII al XVIII. La forma como se integran con elementos contemporáneos que conviven con lo antiguo. El patio gótico me gusta mucho.
La colección es estupenda y se concentra en una etapa del trabajo de Picasso, que va desde su inicio a 1917. La colección de grabados sí abarca todas las etapas y está el trabajo en torno a Las Meninas, que es de 1957. Tuve oportunidad de visitar con calma cada una de las salas y anotar las obras que en esta ocasión me dijeron o gustaron más. Me acuerdo ahora que la primera visita me deslumbró y me marcó. La segunda puse un especial cuidado en una gran exposición temporal sobre el austriaco Egon Schiele.
La colección de cerámica da una idea de la manera que Picasso saca forma a los objetos. Una de las piezas más famosas es un plato con un gran pez en el que combina diversas técnicas. Me gustó mucho. Los expertos Marilyn McCully y Michael Raeburn realizaron un estudio profundo sobre la colección de cerámica del museo que derivó en un catálogo razonado, que incluye un texto de Margarida Cortadella sobre la donación. Me hice del catálogo.
En esta ocasión entendí mejor la evolución y el proceso de creación de las distintas etapas de Picasso. Disfruté mucho la obra expuesta en cada una de las salas. Aprendí y gocé mucho. (Hice la visita con Sebastián)
