El director de cine, Woody Allen manifestó sentirse triste por todos los implicados en el escándalo de abuso sexual en el que está envuelto el productor Harvey Weinstein.
En declaraciones para BBC News, Allen mencionó que “todo el asunto es muy triste para todos los implicados” ya que “es trágico para las pobres mujeres que se vieron afectadas y triste para Harvey, cuya vida está tan arruinada”.
El cineasta también señaló que nunca le llegaron esa clase de rumores a pesar de que trabajó con él en numerosas películas, entre ellas, “Poderosa Afrodita”. “Nunca vino nadie a contarme estas historias de horror con seriedad, y no lo hubiesen hecho porque no estás interesado. Estás interesado en hacer tus películas”.
“Se escuchan rumores todo el tiempo. Algunos resultan ser verdad y otros -muchos- resultan ser historias de tal actriz o tal actor”, destacó.
Asimismo, Allen manifestó su preocupación por este caso y que se desencadene una especie de “cacería de brujas”. “No quieres que esto lleve a una atmósfera de Salem en la que cada hombre que le guiñe el ojo a una mujer en una oficina de repente tenga que llamar a su abogado para defenderse, eso tampoco estaría bien”, enfatizó.
Entre los involucrados en la investigación de Weinstein, se encuentra el hijo de Allen , Ronan Farrow, quien habló con trece de las victimas y expuso sus casos en un artículo para The New Yorker.
Por otra parte, en febrero de 2014, la hermana de Farrow, Dylan quien es hija adoptiva de Allen y de la actriz Mia Farrow, escribió una carta, la cual fue publicada por el diario The New York Times, en donde revela que el director abusó de ella cuando tenía 7 años, pero inmediatamente Woody escribió una respuesta en donde acusaba a su ex de difamarlo.
Ronan en un artículo titulado: “Mi padre Woody Allen, y el peligro de no hacer preguntas”, señaló que él le cree a su hermana, sin embargo, su padre “sigue en libertad y dirigiendo películas gracias a una cultura de impunidad y silencio”.
Sin embargo, Moses Farrow quien también es hijo adoptivo del cineasta, en el 2014 en entrevista con la revista People declaró: “Por supuesto que Woody no molestó a mi hermana”, afirmando que esas acusaciones sólo eran una forma de vengarse de su padre por casarse con otra hija adoptiva de la pareja, Soon-Yi.
(Con información de La Nación, BBC Mundo y La tercera)
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