El contencioso de Chávez contra los medios arrancó cuando en un discurso enrolló un ejemplar del periódico El Nacional, y amenazó con metérselo por el ano a su director, el periodista Enrique H. Silva, hoy exiliado en España.
El contencioso del presidente de México contra los medios arrancó el jueves, cuando comparó a los periodistas con perros de bozal, y el viernes remarcó que “nunca quise igualar a la prensa con los perros, yo respeto a los perros”.
Aunque Chávez había acelerado el paso antes, cuando le preguntó en una cadena nacional de radio y TV al mejor caricaturista de Venezuela, Pedro León Zapata: “Aclárame esto, Zapata, ¿tu piensas así o te pagan para que opines así?”
La caricatura que le molestó al golpista había aparecido en El Nacional (donde Zapata publicaba a diario hacía 50 años) estaba ilustrada con un sable y decía: “A mí me gusta la sociedad civil firme y a discreción”. No mencionaba a Chávez, pero éste lo tomó personal.
Aquí, es de esperar que una segunda andanada contra los medios recaiga sobre los caricaturistas, que son quienes con más fuerza cargan contra personajes de la 4T, aunque esa ofensiva será más soterrada, pero sí elocuente y clara: humor y populismo no se llevan.
De hecho, Zapata sacó a relucir su ingenio en su respuesta a Chávez: “Acláreme esto, presidente, ¿cuánto ha recibido usted para hacerme tanta publicidad?” Era el año 200, y todavía, a dos años de haber ganado las elecciones, Chávez permitía que le respondieran. Después de eso, jamás.
Chávez dijo que “entre la prensa y el poder hay un histórico choque de fuerzas” e impuso una ley de “democratización de los medios”, retomada por Kirchner en Argentina y Correa en Ecuador para regular “programación, publicidad, promoción e información” y negar concesiones a privados.
La “democratización de los medios” fue mencionada en campaña por el actual presidente de México, en reunión con jóvenes del proyecto Kybernus, aunque aclaró que “no vamos a afectar a los concesionarios ni a limitar la manifestación de las ideas; vamos a respetar la crítica”.
Sin embargo, la “Ley de democratización de los medios” llevó a Chávez en 2009 a cerrar 32 emisoras de radio y TV. Ante las protestas, dijo: “Hoy chillan porque estamos democratizando los medios y asegurando la libertad de expresión”.
Aquí, el presidente comentó el jueves: “De ahí surgió una frase fuertísima, todo esto es parte de la transformación que queremos para el país. Le muerden la mano a quien les quitó el bozal”. Y el viernes aseguró que él respeta a los perros.
Y el contencioso no se detendrá hasta que exista una ley de “democratización de los medios”. Para eso la 4T tiene el Congreso.
Claro.