La exsecretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles seguirá en prisión preventiva en el penal de Santa Martha Acatitla, según lo resolvió Ganther Alejandro Villar Cevallos, nuevo juez de control a cargo de este caso luego del retiro de Felipe de Jesús Delgadillo Padierna. El impartidor de justicia calificó como infundada la solicitud de la defensa de que a la imputada se le concediera el beneficio de la prisión domiciliaria.
En la audiencia celebrada este miércoles, la cual se prolongó por casi diez horas, el juez justificó su decisión con el argumento de que Robles Berlanga incurrió en contradicciones respecto a su lugar de residencia, además de que consideró que la indiciada cuenta con los recursos suficientes para sustraerse a la acción de la justicia, reporta El Financiero.
Respecto a este último punto, el representante de la Fiscalía General de la República (FGR), Manuel Granado Quiroz, alegó que la extitular de Sedesol realizó 30 viajes nacionales e internacionales entre 2018 y 2019, de los cuales 11 los efectuó cuando ya no era secretaria de Estado. Según dijo, en estos viajes gastó 507 mil pesos. También aseveró que como funcionaria pública obtuvo ingresos por 18 millones de pesos.
En su intervención, el juez Villar Cevallos aseveró que en su actuación no es por consigna y no tiene interés en perjudicar a nadie, sino que sus decisiones son tomadas con base en “datos objetivos”. No obstante, desestimó los elementos de prueba presentados por la defensa de Robles, por considerar que ya habían sido valorados en las audiencias anteriores. Incluso, respecto al caso de las licencias de conducir indicó que sólo se confirmó que la acusada no informó con la verdad respecto a su domicilio y la existencia de estos documentos.
Cabe mencionar que a pesar de que el juez llamó a las partes a conducirse con respeto durante la diligencia, el Ministerio Público incurrió en varios juicios de valor contra Robles y su defensa. Señaló que llegar a mentir al juzgado “es altamente reprochable” y añadió “no sabemos quién influya a quién, o si es un acuerdo que tienen”. Asimismo, recurrió a una frase de Aristóteles: “El castigo del embustero es que no se le crea aun cuando diga la verdad”. Por lo anterior se hizo acreedor a un apercibimiento y una multa de mil 600 pesos.
Rosario Robles insistió en que su proceso legal es injusto y con motivaciones políticas, punto de vista que fue reiterado por su hija, Mariana Moguel, a la salida de la audiencia. “A mi madre se le persigue por lo que es. Además está acusada por un delito que no amerita estar en un penal”, aseveró.
A su vez, el abogado Epigmenio Mendieta, quien encabeza la defensa de Robles luego de que Julio Hernández Barrios dejara el caso, señaló que se buscará interponer un nuevo recurso de amparo en contra de esta decisión.
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