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viernes 27 diciembre 2024

Aumenta salario mínimo y más la informalidad

por José Yuste

El presidente López Obrador atendió a los empresarios, pero al final hizo lo que pensaba desde el principio, dijo que el salario mínimo debía aumentar un 15%, y así fue.  Negociaciones. Pláticas. Conferencias. Sirvieron de muy poco.

Los organismos empresariales volvieron a perder otra batalla con la 4T. El Consejo Coordinador Empresarial, a cargo de Carlos Salazar, se molestó. La Coparmex, con Gustavo de Hoyos, propuso una ayuda gubernamental que jamás llegó. La Concamin, con Francisco Cervantes, creyó que podía ser la salvadora del acuerdo. No fue así.

Los organismos empresariales no ganaron ni en subcontratación ni en salario mínimo ni en obtener apoyos gubernamentales en la crisis.

ALZA EN MÍNIMO, CORRECTA, PERO 2020 FUE DISTINTO

La política salarial de López Obrador es correcta. Pero el año ameritaba mayor sensibilidad.

La política de elevar el salario mínimo comenzó con el gobierno de Mancera en la CDMX. Le siguió el de Peña Nieto. Pero fue con López Obrador cuando cobró realce. Hoy el salario mínimo ya no funciona como dique antiinflacionario. Busca satisfacer las necesidades básicas de una familia (medida por la Línea de Bienestar del Coneval).

Durante 2019, el gobierno de López Obrador elevó el salario mínimo un 16.2 por ciento. En el 2020 un 20 por ciento. Y ahora para el 2021 lo subirá un 15 por ciento.

Sin embargo, en 2020 vivimos la peor recesión en décadas. Han desaparecido un millón de micro, pequeñas y medianas empresas. En esas difíciles circunstancias, el empresariado proponía para 2021 elevar un 10% el salario mínimo.

ARROLLARON A CCE, CONCAMIN Y COPARMEX

Su propuesta de 10% se estrelló en la Comisión Nacional de Salarios Mínimos, donde gobierno y sindicatos votaron por el 15% de aumento salarial.

Los empresarios viven su peor crisis en décadas. Ahora les aumentan el costo de contratar personal, porque les prohibirán subcontratar y elevar de más el salario mínimo. Y tampoco les das la mínima ayuda.

La mesa está servida para seguir buscando la informalidad como ventana de escape.

¡56.5% de trabajadores en México son informales!

Sobre la economía informal, ayer el Inegi nos lanzaba un dato aterrador: el 56.5% de los empleos en México son informales. ¡56%! Los informales son empleos de baja calidad, sin seguridad social y poco productivos. Mientras que los empleos formales sólo son el 43.5 por ciento.

La economía informal es poco productiva. A pesar de su enorme tamaño en empleo, sólo aporta el 23% del PIB. En cambio la economía formal aporta el 77% del PIB.

Tenemos un grave problema. Los incentivos de este año promueven, aún más, la informalidad. Las empresas buscarán pagar por fuera a sus trabajadores por no poder subcontratar. Usarán más efectivo para evadir impuestos. Contratarán informales para evitar el costo del salario formal. El dato es alarmante: 56.5% de los empleos ya son informales. Y seguimos haciendo más difícil la entrada a la formalidad.


Este artículo fue publicado en Excélsior el 18 de diciembre de 2020. Agradecemos a José Yuste su autorización para publicarlo en nuestra página.

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