En redes sociales se han manifestado críticas y hasta burlas al ventilador Ehécatl 4T, creado por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) para la atención de los pacientes que padecen Covid-19.
Los ventiladores Ehécatl 4T fueron presentados el 14 de julio de 2020, en la conferencia de prensa presidencial, por la titular del Conacyt, María Elena Álvarez-Buylla, quien dijo que el diseño estuvo a cargo del Centro de Ingeniería y Desarrollo Industrial, que la patente sería mexicana y afirmó que cumple con altos estándares de seguridad biomédica y calidad de ingeniería.
Entonces Álvarez-Buylla agregó que los Ehécatl 4T son ventiladores pulmonares invasivos, más baratos que los importados y que, además fueron creados en cinco meses cuando lo normal es que ese proceso tome entre tres y cinco años.
La funcionaria había prometido el 23 de abril que el ventilador mexicano ya estaría construido el 15 de mayo, para cuando ya estarían completamente ensamblados y en pocos días instalados en los hospitales.
Sin embargo no fue así, por lo que el 28 de mayo, a ser cuestionada sobre el asunto, se desdijo: entonces afirmó que lo que había dicho es que el 15 de mayo iniciaría la fabricación. Añadió: “Si ustedes regresan, y afortunadamente todo esto se guarda en la memoria porque todas estas conferencias se graban y ustedes regresan a mi presentación, ustedes podrán ver ahí que yo asenté claramente que la promesa formal era iniciar la fabricación de los ventiladores el 15 de mayo, cosa que ya ocurrió”.
Pero la transcripción y el video la desmintieron.
Ahora, meses después, varios médicos han cuestionado la calidad de Ehécatl 4T en redes sociales, como ocurrió con Alfredo López Ponce, quien señaló lo siguiente: “Es una bolsa autoinflable para impulsar aire a través de una mascarilla o un tubo adentro de la tráquea. No hay regulación posible de oxigenación o presión”.
Carlos Torruco, médico de la Unidad de Terapia Intensiva en el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, se preguntó sobre Ehécatl 4T: “Éstos son los ventiladores del @Conacyt_MX ??? Es pregunta seria…”. Y comentó: “Inútil, improvisado, de mala calidad y peligroso…. así como todo en la 4T”.
Por su parte, para el anestesiólogo Enrique Delgadillo el Ehécatl 4T “no es un ventilador, es un MIP (médico interno de pregrado) robotizado. Una mano mecánica gigante presionando un dispositivo para ‘soplar'”.
Otra doctora, @DoctoraSteph, comentó que los ventiladores del Conacyt “sólo proporcionan ventilación con presión positiva”, sin otros elementos importantes como monitoreo, alarmas, indicadores, alarmas, sistema neumático y otros. Finalizó: “Es como si quisieras manejar tu Corvette con solo motor y chasis”.
Según Jorge M. Velázquez Rabiela, médico urgenciólogo, escribió: “¡No mamen, robotizaron a un MIP! ¿Qué pedo con ese armatoste?”.
Otro usuario de Twitter comentó sobre la fabricación mexicana de Ehécatl 4T: “Es como el que se diseño en el MIT desde mayo o junio del año pasado, y del cual publicaron planos y especificaciones de manera gratuita… Solo lo metieron dentro de un gabinete y le pusieron un nombre piterisimo…”.
Asimismo, varios se refirieron a Ehécatl 4T como un ambu, un bolsa autoinflable que sirve para ayudar a ventilar a personas que no pueden respirar de manera adecuada.
