La secretaria de Medio Ambiente de la Ciudad de México, Tanya Müller, informó este jueves que los estudios periciales que se le practicaron al cuerpo del gorila Bantú concluyeron que el animal no murió por una sobredosis de anestesia.
“Las dosis que se aplicaron al gorila Bantú se compararon con las dosis anestésicas que se aplican a nivel mundial. El ejemplar no recibió una sobredosis de anestesia, esa fue la conclusión a la que llegaron los expertos”, dijo Müller, según el reporte de El Universal.
Durante una reunión de trabajo que tuvo con diputados de la Asamblea Legislativa de la Ciudad de México, Müller García señaló que los expertos de la UNAM, de la Semefo y del laboratorio especialista en gorilas de San Antonio, Texas, no han recibido ninguna clase de pago por lo que -sostuvo- dieron “su opinión objetiva del caso”.
El pasado 7 de julio Bantú fue anestesiado para ser trasladado al zoológico de Guadalajara, con el objetivo de que se apareara. No obstante, tras suministrarle los analgésicos éste murió por un paro cardiorespiratorio.
Según la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la UNAM, el gorila padecía un trastorno cardíaco crónico usual en este tipo de especies que viven en cautiverio.
mahy
