Los dichos del presidente Andrés Manuel López Obrador pueden incitar a la violencia y son inaceptables en una democracia, más en un país con el récord de periodistas asesinados, expuso María Amparo Casar, presidenta de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), en respuesta a las diatribas del mandatario.
En los días recientes López Obrador ha recrudecido sus invectivas contra la prensa debido a las revelaciones acerca de las residencias que ha ocupado su hijo José Ramón López Beltrán con su pareja, Carolyn Adams Solano, ataques que, además, ocurren en un contexto en el que durante el presente año un periodista ha sido asesinado a la semana.
Una de las organizaciones que participó en el reportaje sobre las mansiones fue MCCI, que desde antes ha sido motivo de embestidas por parte del presidente (que la ha llamado “Mexicanos A Favor de la Corrupción”). Por ello, mediante un video, Casar dio respuesta al mandatario.
“Las palabras incendiarias que emanan de la boca del presidente bien pueden incitar a la violencia y, por ende, no pueden ni deben ser aceptadas en una democracia. Mucho menos debería ser práctica cotidiana en un país que detenta el lamentabilísimo récord mundial de cantidad de periodistas asesinados”, dijo Casar.
Mencionó que no es novedad que los presidentes descalifiquen a quienes muestren sus actos de corrupción y los critiquen, porque que ya esa práctica ha llegado “al punto de convertirse en una fastidiosa, incesante letanía de insultos y de infamias desde el poder”. Por ello se cuestionó si aún se pueden exponer ideas y denunciar la corrupción “sin temor a represalias”.
Por lo anterior, manifestó su condena a los insultos y descalificaciones dirigidos por López Obrador contra comunicadores como Carlos Loret de Mola, Carmen Aristegui, Víctor Trujillo, Sergio Aguayo, Dsenise Dresser y otros periodistas que “han sido y siguen siendo objeto de las calumnias proferidas por el presidente, que han sido acusados sin prueba alguna y sin el derecho a utilizar el mismo potente micrófono desde el cual se les acusa. Esto puede tipificarse simplemente como un abuso de poder”.
Sobre el caso de MCCI, mencionó que ha sido vilipendiada en 96 ocasiones durante las conferencias de prensa presidenciales, menciones “que ocurrieron como reacción a las distintas denuncias periodísticas y las investigaciones e irregularidades que documentamos”.
Al respecto, aclaró a López Obrador que MCCI no está contra él, sino de la corrupción, y le recordó que han denunciado casos famosos como Odebrecht, las estafas Maestra y Verde, los piratas de Borge, las empresas fantasma de Javier Duarte y la Operación Zafiro.
Al respecto, agregó: “El propio presidente utiliza de manera sistemática nuestras investigaciones para ejemplificar la corrupción del pasado, pero, eso sí, no la del presente. ¿Será que las del pasado eran válidas porque sumaban a su causa, pero las de ahora no lo son porque lo exponen?”.
Señaló: “Que quede claro: nosotros no hemos cambiado; quien cambió fue el ocupante de la silla presidencial, el titular del Poder Ejecutivo”.
Fue más adelante en sus señalamientos cobre el presidente: “Se presenta en público como el gobernante que no tolera la corrupción ni la impunidad; se atreve a decir que terminó con ellas, que ya no existen en nuestro país. Los hechos los desmienten: López Obrador no ha reducido la corrupción y, lo que es más, ha ensanchado la impunidad. En sus tres años de gobierno se han exhibido decenas de actos de corrupción por parte de funcionarios de su gobierno, y a todos los defiende y los exonera”.
