A una semana del asesinato de las periodistas Yessenia Mollinedo Falconi y Sheila Johana García Olivera, la Fiscalía General del Estado de Veracruz detuvo a un presunto implicado en el crimen, pero apenas horas después tuvo que liberarlo porque fue una confusión.
La tarde de este martes la Fiscalía veracruzana dio a conocer lo que parecía un notable avance en el caso de las comunicadoras ultimadas: en coordinación con miembros de la Coordinación Nacional Antisecuestro (Conase) había logrado ejecutar una orden de aprehensión contra Antonio de Jesús “N”, el Mara, quien habría participado en el crimen.
La detención del sospechoso, un hombre de 20 años del que fue exhibida su imagen con los ojos cubiertos acompañado por un par de policías, fue ejecutada en Xalapa. La Fiscalía anunció que el detenido sería presentado ante un juez de proceso, siempre respeto a los derechos humanos y al debido proceso, para que su situación jurídica fuera definida.
También presumió que, gracias a labores de inteligencia, el sospechoso había sido localizado en el municipio de Naolinco, Veracruz.
A través de Twitter, el gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García, indicó que en una reunión con la fiscal del estado, Verónica Hernández Giadáns, esta informó que “ se logró cumplimentar un mandamiento judicial en contra de Antonio de Jesús ‘N’ alias ‘El Mara’ por el presunto delito de homicidio doloso calificado de dos trabajadoras de un medio electrónico el pasado 9 de mayo en Cosoleacaque”.
Empero, apenas unas horas después la propia Fiscalía anunció la liberación del hombre detenido, porque fue confundido: sólo tiene el mismo nombre de la persona a la que considera presunto responsable.
La Fiscalía veracruzana ya no habló de coordinación con miembros de la Conase, sino que estos fueron los responsables de la detención, y añadió que, “al validar su identidad”, lo que halló fue una homonimia, por lo que “fue puesto en libertad de inmediato para evitar vulnerar sus derechos”.
Y la Fiscalía veracruzana añadió que continúa su operativo en búsqueda de los responsables del doble asesinato, y prometió, pese a lo ocurrido, que no habrá impunidad (sic).